El gobernador de Australia se fue por un escándalo

El gobernador general de Australia, Peter Hollingworth, renunció ayer a su cargo en medio de un escándalo por supuesto encubrimiento de casos de abusos sexuales a niños por parte de religiosos de la Iglesia Anglicana, cuando era arzobispo de Brisbane en los años 90. El representante de la reina de Inglaterra había sido acusado además de la violación de una mujer hace 40 años.
El funcionario fue muy criticado luego de que una comisión investigadora de la Iglesia Anglicana lo censurara hace unas semanas por no echar a un sacerdote del que sabía que abusó de un niño. El representante de la reina reconoció ahora haber cometido "un grave error de apreciación", al mantener e incluso promover al sacerdote paidófilo.