Año CXXXVI
 Nº 49.852
Rosario,
domingo  25 de
mayo de 2003
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Juzgan a un suboficial por asesinar a un joven hincha
La víctima tenía 17 años y fue muerta de un escopetazo tras un partido entre Deportivo Morón y Almirante Brown

Buenos Aires.- Un suboficial de la policía bonaerense será sometido a juicio oral acusado de asesinar a escopetazos un adolescente, hincha de Deportivo Morón, al término de un partido de fútbol jugado en diciembre de 2000.
Se trata del policía Alfredo Silva quien será juzgado desde el 23 de junio próximo por el crimen de Mariano Guaraz, de 17 años, ocurrido al término de un partido que jugaron Deportivo Morón y Almirante Brown en Isidro Casanova.
Silva llegará al juicio oral detenido luego de que un juez le negara el beneficio de continuar el proceso con algún tipo de libertad vigilada.
El policía será juzgado por el Tribunal Oral 3 de La Matanza integrado por los jueces Fabián Van Estaden, Liliana Logroño y Franco Fiumara, en tanto la fiscal será Gabriela Rizuto. En el debate oral declararán 120 testigos.
Guaraz fue asesinado el 16 de diciembre del 2000 a la salida de la cancha de Almirante Brown, cuando hinchas de Deportivo Morón peleaban con policías de La Matanza. En los mismos disturbios resultaron heridos de bala Luis Chamah, de 25 años, y Miguel Lobato, de 34.
Los peritajes revelaron que los disparos que mataron a Guaraz e hirieron a los otros dos hinchas fueron efectuados por la escopeta que portaba en ese momento el policía.
Silva quedó detenido al día siguiente del crimen, y el 5 de enero del 2001, el fiscal pidió la prisión preventiva por el delito de homicidio simple, que prevé penas de 8 a 25 años de cárcel. Al ser indagado, declaró que pensó que había disparado con balas de goma.
Además, un comisario inspector y un subcomisario de La Matanza fueron pasados a disponibilidad por su presunta responsabilidad en el operativo.
En la investigación se determinó que el policía detenido por el crimen "no estaba afectado al operativo de seguridad en la cancha" de Almirante Brown, y fue al lugar "con una escopeta personal" y "sin que nadie lo autorizara". (Télam)


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