Aumenta el consumo de cocaína en Europa

El vicepresidente colombiano advirtió en Berlín que esa droga no será desplazada por los alucinógenos sintéticos

El vicepresidente colombiano, Francisco Santos Calderón, dijo ayer en Berlín que, según expertos en drogas, Europa está experimentando un boom en el consumo de cocaína, que no se verá desplazado por las tendencias de moda hacia los alucinógenos sintéticos.
"No es tan cierto" que la cocaína esté entrando en una fase de decadencia al verse confrontada con tendencias de moda hacia un mayor consumo de drogas sintéticas por los jóvenes, dijo Santos Calderón. "Lo que estamos viendo es que una parte importante de la producción de drogas se está yendo a Europa", agregó al responder a la pregunta de si esta probable evolución sería una mala o una buena noticia para su país.
Santos Calderón concluyó una visita de trabajo de tres días a Alemania, que tenía por objetivo fortalecer los lazos de cooperación entre ambos países y analizar la situación del conflicto interno colombiano.
Si bien el vicepresidente colombiano mantuvo entrevistas con miembros del gobierno y del parlamento en Berlín, las autoridades alemanas evitaron dar un perfil alto a las conversaciones que tuvieron lugar por iniciativa exclusivamente colombiana.
"Aproximadamente el 40 por ciento de la cocaína está empezando a entrar en Europa", agregó el vicepresidente colombiano en una entrevista.
"Todas las estadísticas de los epidemiólogos de drogas predicen que Europa está entrando en un boom de cocaína", agregó.
Europa, que nunca fue un mercado muy importante para la cocaína, se está convirtiendo en un destino muy interesante para los narcotraficantes, según dio a entender el vicepresidente colombiano.
"De todas maneras no hay droga buena", aseguró Santos Calderón.
"En la medida en que los estadounidenses o los europeos dejen de consumir cocaína muchos de los dineros que hoy se van a las arcas de la guerrilla y de los paramilitares para financiar su conflicto, ya no llegarían, éstas se vaciarían y seguramente la capacidad militar de estas organizaciones disminuiría dramáticamente", concluyó afirmando el vicepresidente colombiano Santos Calderón. (AFP)