Año CXXXVI
 Nº 49.849
Rosario,
jueves  22 de
mayo de 2003
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Reclaman deudas salariales y por las fuentes de trabajo
Un hotel céntrico de 4 estrellas fue ocupado por sus empleados
Plaza del Sol, de San Juan al 1000, ya no tiene ningún pasajero alojado. Le cortaron hasta la luz y el agua

Un hotel de San Juan al 1000 fue tomado ayer por sus empleados como forma de reclamo por seis meses de salarios atrasados. Pero no se trata de una protesta más. El edificio está desierto de pasajeros, carece de servicios básicos y sobrevuela el fantasma del desmantelamiento de sus instalaciones. Por la tarde, y a ritmo de batucada, un grupo de los 40 trabajadores afectados escrachó los domicilios de los dueños, ante la falta de una respuesta concreta.
Plaza del Sol, ubicado en San Juan y la cortada Barón de Mahuá, abrió sus puertas en agosto del 96 con una apuesta fuerte en materia hotelera: una torre de 10 pisos, 40 habitaciones, pileta, sauna y solarium, categoría 4 estrellas.
Y para albergar a sus pasajeros la firma Plaza Hotel SA dispuso de medio centenar de empleados entre mucamas, conserjes y personal gastronómico.
El emprendimiento vivió momentos de pujanza, pero desde hace ya un año -cuando cerró el Hotel Plaza (vinculado al mismo grupo empresario)-, todo comenzó cuesta abajo.
Según denunciaron los trabajadores, desde hace unos 6 meses dejaron de percibir sus sueldos, cuyo promedio ronda los 350 pesos. Pero a ello hay que sumarle la falta de aportes jubilatorios, obra social, ticket canasta y falta de pago de los aumentos no remunerativos decretados por el gobierno nacional.
"Al principio no protestábamos, para ver si el hotel se vendía a algún interesado, pero fueron sólo promesas. Ya no podemos más y salimos a la calle", apuntó uno de los jóvenes desde el hall del edificio tomado.
La estrategia es conservar los puestos laborales, por eso cada uno de los 44 damnificados cumple con su turno de 8 horas.
Los últimos pasajeros ya no tenían servicio de TV por cable, ni dulce para las tostadas, se había cerrado el comedor y desde hace unos días no hay luz, ni agua. Pero todos se dispusieron a resistir hasta el agotamiento y reclaman la presencia de "algún político que le interese el problema".



Los empleados reclamaron sueldos atrasados.
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