Indagarán al magistrado Rogiano por cohecho

El gobierno aceptó la renuncia del juez de menores santafesino, que sigue detenido y se quedó sin fueros

Santa Fe.- La renuncia elevada por el juez de menores Julio César Rogiano al Poder Ejecutivo santafesino fue aceptada ayer por el gobernador Carlos Reutemann y el magistrado podrá ser ahora indagado en la causa que se le sigue por la presunta comisión del delito de cohecho agravado. Al mismo tiempo la aceptación de la dimisión presentada el pasado lunes por el magistrado de menores santafesino evitó la formación de un jury de enjuiciamiento para analizar la posibilidad de destituirlo por la presunta comisión de delitos.
Según trascendió ayer en los tribunales de esta capital, al haber perdido sus fueros como magistrado, Rogiano será citado a prestar declaración indagatoria entre hoy y mañana por el juez de Instrucción de la 7ª Nominación, Diego De la Torre, en el marco de la causa en que se investiga la presunta comisión del delito de cohecho agravado, imputación por la cual Rogiano se encuentra detenido desde el 8 del corriente mes.
Rogiano fue detenido hace dos semanas durante un operativo llevado a cabo por agentes de la División de Asuntos Internos de la policía provincial. El magistrado habría sido sorprendido in fraganti con una suma aproximada de 2.500 pesos en efectivo en su poder, presuntamente producto de un soborno requerido por el magistrado a los familiares de un joven que se encontraba detenido a su disposición.
Si bien la causa aún no fue caratulada por el juez De la Torre, el juez Julio Rogiano podría ser imputado de la presunta comisión del delito de cohecho agravado, figura contemplada en el artículo 257 del Código Penal.
El episodio que involucra al magistrado capitalino se inició a mediados del mes de abril pasado, a partir de la detención de una joven pareja sospechada de haber dado muerte a su bebé recién nacido, cuyo cuerpo sin vida fue hallado por un vecino en el interior de un contenedor.
A cargo del juez Rogiano quedó detenido el muchacho integrante de la pareja involucrada en el supuesto ilícito, un menor de 17 años. Junto a su mujer, de 19, alegaron en la justicia que el pequeño nació muerto y que el parto se realizó de manera clandestina, supuestamente sin el conocimiento de los padres de ambos.
Ante una denuncia radicada por el abogado del menor, Rogiano comenzó a ser investigado por el juez De la Torre a los fines de determinar si había solicitado a familiares de aquel una suma de dinero a cambio de su liberación. En esas circunstancia Rogiano, y otra mujer que se encuentra involucrada en la causa, habría recibido una coima de 2500 pesos con billetes marcados que habrían sido hallados en su poder y en la caja fuerte de su juzgado.