Año CXXXVI
 Nº 49.844
Rosario,
sábado  17 de
mayo de 2003
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Espectacular asalto de una banda en Rouillón al 2100
Copan una droguería y se alzan con valiosa mercadería en dos camiones
Robaron artículos de perfumería, pañales y analgésicos por 170 mil pesos. La policía no tiene ninguna pista

Las bandas de hampones que operan en Rosario y su zona de influencia parecen contar cada vez con más y mejores medios para concretar sus atracos de la forma más efectiva. Anteayer, un grupo de delincuentes copó una droguería de la zona sudoeste y se apoderó prácticamente de toda la mercadería disponible con su propio servicio de flete: dos camiones que estacionaron de cola dentro del local y lo cargaron durante dos o tres horas con mercadería valuada en 170 mil pesos. La policía rastreaba ayer intensamente los vehículos, pero no había ninguna pista concreta, salvo que uno de los maleantes tenía tonada cordobesa.
Además de logística propia, la banda demostró que contaba con excelente información del interior de la propia empresa. Habían pasado algunos minutos de las 13 del jueves, cuando el encargado de la droguería Del Centro, ubicada en Rouillón 2174, atendió el portero eléctrico del local. Desde la calle una voz masculina lo llamó por su nombre de pila y le informó que venía "de parte del (hipermercado) Makro". Entonces, el empleado simplemente abrió la puerta.
Así comenzó el atraco. Detrás del que había tocado timbre, atropellaron dos hombres más. Los tres tenían sus rostros descubiertos y empuñaban poderosas armas de fuego. "Que no se taparan la cara quiere decir que nunca podrían ser reconocidos. Sospechamos que son de afuera", comentó una fuente policial que trabaja en la investigación del caso. La secuencia del copamiento siguió con los ladrones controlando al encargado del negocio y a otro empleado más.
Esas dos primeras víctimas fueron maniatadas con sogas en un entrepiso del local. Paralelamente, llegaba otro empleado de 19 años que fue sorprendido por los maleantes apenas ingresó al local. Ese chico fue obligado a punta de pistola a abrir los portones de la empresa para que ingresaran de culata dos camiones traídos por la propia banda, cuyas marcas y modelos no fueron revelados "para no perjudicar la investigación", según confió a este diario un vocero de la seccional 19ª.
"Después le ordenaron al pibe que se subiera al clarke o montacargas y que comenzara a llenar las cajas de los camiones", comentó la fuente consultada ayer. Curiosamente, la banda no se habría llevado ningún medicamento, pero si gran cantidad de artículos de perfumería, packs de pañales, toallas femeninas, tampones y cajas de analgésicos. Según trascendió el valor de la mercadería sustraída llega a los 170 mil pesos. Los hampones, de acuerdo a la versión policial, trabajaron con mucha tranquilidad durante casi tres horas.
Después, llevaron al chico que operó el montacargas con el resto de las víctimas, lo ataron y desaparecieron saliendo en caravana con los camiones. Sorprendido por el despliegue logístico de la banda, un vocero de la Brigada de Investigaciones de la UR II se quejó: "Lo único que falta es que se traigan sus propios camiones".
Para el vocero, lo robado estaba compuesto por mercadería de "venta libre, que es más fácil del ubicar en comercios". El policía estimó que el grupo sería de la provincia de Buenos Aires, aunque consideró que uno de los maleantes tenía un marcado acento cordobés. Un dato demasiado que parece pobre para estimular la investigación.



Los asaltantes actuaron con absoluta impunidad.
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