San Antonio Spurs, con el argentino Emanuel Ginóbili como figura preponderante terminó con la dinastía de Los Angeles Lakers al conseguir el pasaje a la final de la Conferencia Oeste de la NBA tras vencerlos en el sexto juego del play off.
Los Spurs dejaron en el camino al rival más difícil y con mucha mayor facilidad de la prevista, ya que fueron los dominadores desde el comienzo de la serie.
El ala pivote Tim Duncam resultó imparable y fue el que marcó las diferencias.
Hay que dimensionar lo realizado por Emanuel Ginóbili, que si bien no se destacó en el goleo, aportó otras cosas, como asistir a sus compañeros, especialmente a Duncan o en la marca de Kobe Byrant.
El camino a transitar por los Spurs parecía bastante accesible, tras los dos primeros juegos en su estadio, pero volvieron a la realidad luego de la lección que le brindaron en el tercero los tricampeones en el Staples Center, con gran producción de O'Neal y Bryant.
En el cuarto, San Antonio tuvo todo para ganar ya que llegó a sacar una diferencia de 16 tantos, pero los Lakers, de la mano de Bryant, lo dieron vuelta, ganaron 99-95 e igualaron la serie.
La historia pudo cambiar en el quinto juego en el CBS Center. Los Spurs llegaron a estar ganando por 25 puntos, pero aflojaron y casi lo pierden. Un triple de Robert Horry (0 de 26 en esa distancia en los playoffs), no entró y salvó del incendio a los texanos, que se impusieron por 96-94.
La serie regresaba a los Angeles y todo hacía preanunciar un partido de desempate. Sin embargo, esa posibilidad quedó desechada desde el mismo comienzo, cuando los Spurs tomaron el timón de las acciones, y terminaron humillando a los tricampeones, que en una actuación para el olvido perdieron (110-82) y dejaron escapar la chance de seguir peleando por el tetracampeonato. (Télam)
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La Ciudad
