Unas 20 mil personas le pusieron marco al cierre de la Feria Internacional de la Alimentación Rosario (Fiar) 2003, que tras cuatro jornadas de intensas reuniones de negocios, experimentó ayer una "invasión" de público. Batucadas, show gastronómicos y degustaciones estuvieron a la orden del día en el final de una muestra que superó las expectativas de organizadores y expositores. Según un relevamiento de la consultora MEC, el 30% de las empresas que estuvieron presentes en la exposición concretaron negocios mientras que el 90% realizó contactos comerciales para desarrollar en el futuro.
La extensa cola formada por Boulevard Oroño, en la entrada del predio ferial del Parque de la Independencia, obligó a los organizadores de Fiar a "administrar" la entrada de visitantes, organizando contingentes que iban ingresando a medida que otros se retiraban, para evitar el colapso de la infraestructura dispuesta para la muestra.
A diferencia de lo ocurrido de miércoles a sábado, el domingo fue el día del público no especializado, que inclinó la feria hacia los pabellones destinados a la exposición de productos alimenticios. La batucada organizada por la gente de Miga-Miga y la demostración gastronómica de la escuela de Alta Cocina (con el homenaje a Doña Petrona, presentación del locro del siglo XXI y show de gastronomía erótica), organizada en el espacio del Magic, concentraron la atención de los visitantes.
En los pabellones de servicios, equipamiento y packaging, la feria ya había cumplido su cometido el sábado, luego de cuatro jornadas de participación a full en las rondas de negocios.
"El público comercial y los contactos comerciales se dieron sobre todo en los primeros cuatro días, hoy fue más para la participación del público general, puede ser que a algún expositor le genere una molestia pero también es importante que esta feria, además de servirle a los empresarios, tenga la aceptación social que se puso en evidencia en el día de hoy", señaló Ricardo Diab, uno de los organizadores del evento.
Los expositores de Fiar 2003, tanto en el rubro de alimentos como en el de tecnología y servicios, se mostraron satisfechos con el resultado. Según un relevamiento de la consultora MEC, sobre 128 empresarios, el 31,25% dijo que concretó negocios, mientras que el 90% aseguró que realizó contactos firmes para operaciones futuras. En cuanto al público empresario que asistió a las rondas de negociación, el 13,97% dijo haber abrochado operaciones mientras que el 69,8% espera cerrarlas a futuro.
En el segmento de las maquinarias y equipos se mostraban especialmente optimistas ya que en el marco de la Fiar pudieron acceder a conversaciones cara a cara con una treintena de compradores de distintos países, especialmente sudamericanos, que en muchos casos redundaron en ventas puntuales.
Nivel internacional
El director de Comercio Exterior de la Secretaría de la Producción, Daniel Galaverna, destacó "la buena impresión que se llevaron que los empresarios extranjeros que participaron de la ronda de negocios del Salón de Grandes Compradores de los productos ofrecidos por las firmas locales".
Diana Sandoz, subsecretaria de la Producción, afirmó que "después de tres ediciones, la Fiar está definitivamente instalada en el calendario de ferias" ya que el sector empresario la considera "una posibilidad concreta para hacer contactos y generar oportunidades de negocios".
Si bien la competitividad de la producción local generada por la devaluación fue un incentivo extra a la "globalización" de la feria, el crecimiento de la muestra desde la primera edición en el 98 parece explicarse por razones menos coyunturales.
Precisamente, se supo que hubo directivos de empresas que organizan megaeventos agropecuarios recorriendo la exposición y tomando contacto con los organizadores. En qué se traducirá esa avanzada está por verse pero la realidad indica que el liderazgo de Fiar en el rubro de muestras alimentarias se consolida también a partir de que la otra gran exposición que se realizaba en Argentina, el Sial Mercosur, se mudó por el momento a Brasil.
Para las empresas de la región, la mayoría pymes, la muestra implica un roce internacional, más allá de la realización de una operación puntual. "Para las rondas internacionales llamamos a la gente de la Federación nacional porque nosotros no tenemos volumen, entonces a partir de los contactos que hicimos nos vamos a organizar entre todos para poder hacer una buena oferta", señalaron en el stand de Apicoop Litoral, una cooperativa de apicultores.
A unos metros de distancia, los pescadores de La Picasa, ex productores o trabajadores agropecuarios que sufrieron el desborde de esa laguna, presentaban el "Pejerrey de La Picasa", un especiallity presentado entero, esvicerado y descamado; despinado o como filet mariposa y filet blanco. Para estos emprendimientos de fuerte contenido social, Fiar significó un espacio importante de exhibición.
Es el caso también de la cooperativa de trabajadores que explota Milhojas y Cooperativa de Trabajo de Santa Isabel Ltda (Cotrasi), formada por los trabajadores del ex frigorífico Fonarolo de esa localidad. La cooperativa firmó un convenio con Aprocer, un grupo de productores de Rosario, a los cuales realizan la faena, desposte, fabricación de fiambres y el despacho. Juntos formaron una tercera empresa de ventas que presentó en la muestra la línea de cortes frescos y fiambres marca Aprocer.
La muestra profundizó las relaciones que en muchos casos ya existen entre los mismos expositores, con casos de integración con proveedores, de asociación entre fabricantes de productos similares o de sinergias como las que se dieron en el espacio de producciones artesanales y no tradicionales.
Durante los cinco días de exposición se realizaron 2.600 contactos comerciales oficiales, es decir los que se realizan dentro de las distintas rondas de negocios. Unos 1.600 correspondieron al segmento conocido como "todos contra todos", en el cual se ponen en juego productos y servicios de todo tipo.
Servicios
"Acá hicimos muchos clientes nuevos, porque ofrecemos un servicio que cada vez es más demandado", señalaron en el stand de un estudio especializado en el registro y seguimiento de marcas y patentes, con oficinas en Córdoba, Rosario, Buenos Aires y Mendoza. El tema de la inscripción de marcas y patentes industriales e intelectuales comenzó a ser atendido por las empresas más chicas recién en los últimos años, debido a los problemas con los que se encontraban cuando lanzaban una marca al mercado y por el mismo dinamismo que han tomado muchas empresas en la búsqueda de innovaciones. En el pabellón de servicios, el estudio ofrecía a modo gratuito un análisis de factibilidad, que pasaba por buscar en una base de datos computarizada si la marca o la invención que el cliente proponía estaba ya inscripta.
De miércoles a domingo, la Fiar 2003 convocó a unas 57 mil personas, superando la edición anterior. Según señalaron desde Cofer, el consorcio organizador, el 90% hicieron ya reservas de stands para el próximo capítulo mientras que unas 20 empresas que no habían participado se anotaron ya en el pre-registro.