Mariano Bereznicki / La Capital
No luce pero sigue ahí, prendido en el lote de los protagonistas. Así es este Central versión 2003, para muchos un equipo bastante pobre en cuanto a una propuesta colectiva pero muy rico en cuanto a las individualidades. Ayer, por la sexta fecha del torneo Apertura de la Rosarina, apenas pudo igualar como local ante Tiro Federal. Pero más allá de mezquindad que rodea al plantel, los canallas continúan siendo el único invicto del campeonato. Nadie puede juzgar la racha positiva que envuelve a los auriazules. Porque además de ser el único escolta del líder 1º de Mayo (está a un punto), es junto con Renato Cesarini el equipo que más goles hizo hasta el momento. Y como si esto fuera poco, hay que agregarle que hace cinco partidos que no le convierten tantos. A pesar de que carece de un esquema claro de juego, es más que evidente que merced al potencial de sus jugadores está marcando una cierta diferencia. La propuesta de buen espectáculo que debían cumplir con Tiro Federal se postergó para otra función. Es que tanto canallas como tirolenses no estuvieron a la altura de las circunstancias. Y tal vez por ese motivo fue que ayer se vio un aburrido encuentro. Los que estaban a cargo de generar fútbol faltaron a la cita. Los intermitentes chispazos de Lucas Correa y Diego Barrientos no fueron suficientes para encender el motor de la zona más ofensiva que presentó el escenario. La propuesta que exhibió Tiro Federal fue muy mediocre. Apostó y apeló al contragolpe. O mejor dicho a lo que pudiera inventar el delantero Erie Banduine. Y en el balance final no fue un mal negocio para los de Ludueña, porque llegaron en tres claras ocasiones en el primer tiempo y dos en la segunda etapa. En tanto Central apenas pudo inquietar con seriedad a Santos recién sobre el final del primer acto, con dos tiros libres ejecutados Lucas Correa y en tres oportunidades en el complemento vía la Pantera Negra Rubén Molina, acaso el delantero más movedizo que tuvo el partido. Si bien algunos nombres que integran el plantel canalla como Lucas García, Sergio Albarracín o Guillermo Faría mostraron buena técnica, no bastó para poder vulnerar la valla de los Tigres, que mostraron una zaga de marcadores centrales (Bauza y May) muy segura. En definitiva, el empate fue como consecuencia de lo poco que produjeron.
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