cartas

Votos comprados

Toda la pandilla que formó el Frenapo en su momento, con cuya campaña "contra la pobreza" -la de ellos- consiguieron los planes Jefas/Jefes entre los punteros de Duhalde y personajes varios, tiene a todos esos beneficiarios cautivos y amenazados si no votaban a Kirchner. Si Duhalde y Alfonsín
-en una nueva alianza- no hubieran pagado coimas a todos los punteros para que voten a Kirchner y Carrió -coima extendida a sectores de ultraizquierda-, Menem hubiera ganado en primera vuelta. Todos los izquierdistas que hoy están contentos saben que ese dinero se obtuvo del juego clandestino y del que aporta el contribuyente
-también el de ustedes si pagan los impuestos-. Sin la "compra de votos" o amenazas de retiro de planes saben muy bien que tanto Kirchner como Carrió no hubieran logrado esos porcentajes. Si en segunda vuelta ganara Kirchner el país tendría cuatro presidentes: Kirchner y la mujer, Duhalde y la mujer y Alfonsín dirigiendo detrás de alguna cortina. Los que están contentos con este resultado, anteponen su ideología al bienestar de la patria. Estos sectores de izquierda, hace años que se han unido para destruir el crecimiento de Argentina de los años •90, por sus viejos anacronismos. El sector de Kirchner y el ARI se aliaron para el 27, compraron los votantes para derrotar al doctor López Murphy y luego van por el presidente Menem. Ambos tienen ideas modernas y volverían a poner a Argentina dentro de los países desarrollados. Si ganan estaríamos dominados por grupos de montoneros que llegarían al poder por el voto de la gente y el país sería ingobernable y no tendría remedio.
Susana Cabal