Año CXXXVI
 Nº 49.829
Rosario,
viernes  02 de
mayo de 2003
Min 14º
Máx 21º
 
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Punto de vista: Una esperanza para el musical

Rodolfo Bella / La Capital

¿Qué hizo que Rosario se transformara en el epicentro de una actividad como la comedia musical? En el contexto de la extensa trayectoria teatral rosarina, la aparición de esa actividad abordada de manera formal y sistemática constituye un hecho trascendente.
La masividad de público es un fenómeno esquivo a las salas locales, sin embargo las comedias musicales llenan teatros, suman fanáticos y valoran cada una de las presentaciones, tanto de puestas locales como aquellas que llegan con la sobreentendido control de calidad que significa un origen porteño en el imaginario colectivo.
Sin embargo, las cosas están cambiando. Así como bandadas de jóvenes y adolescentes se arremolinan impacientemente en torno a conocidas figuras del género provenientes de Buenos Aires cuando llegan a Rosario, los mismos chicos y chicas ya no desconocen a los protagonistas masculinos y femeninos de obras que en unos pocos años se transformaron en referentes para una nueva generación de espectadores.
Los rosarinos reiteran ese fenómeno cada año con las puestas locales, aún a pesar de cierta competencia despareja que puede significar tener que lidiar con la plusvalía de popularidad que significa el paso por la TV.
Los relatos clásicos, tanto de adultos como para chicos, siempre fueron una fuente sólida de inspiración y también tienen su participación. En el proceso de transferencia que tienen las fantasías a la realidad, la materialización del héroe en escena, tantas veces imaginado a través de la literatura o con las proyecciones en el cine, toma la extraña forma del deseo realizado.
Los elencos locales formados por bailarines, actores y cantantes cuentan únicamente con ese reaseguro literario y de versiones cinematográficas de algunas de sus puestas, además de su pericia técnica y un talento moldeado con extenuantes sesiones de entrenamiento. Sin embargo eso, sin ayuda de una desmedida infraestructura publicitaria, logró insertar unos productos que ya forman parte de la tradición cultural rosarina.


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