La epidemia de neumonía atípica causó más de medio centenar de muertos entre viernes y sábado en Canadá y Asia, transformando la capital china en una ciudad fantasma a causa del cierre de lugares públicos como cines, bares y cybercafés. Tampoco hay encuentros deportivos y la gente ni siquiera puede casarse.
En total, de acuerdo al último balance proporcionado ayer y revelados más casos que no se conocían, la epidemia del síndrome respiratorio agudo severo (Sras) ha afectado en el mundo a unas 5 mil personas, de las cuales han muerto 316.
De los 51 muertos anunciados entre el viernes y el sábado por las autoridades sanitarias de los cinco países o territorios, 24 se produjeron en Hong Kong -entre ellos un hombre de 28 años-, 21 en China y 4 en Canadá, mientras que Taiwán deploró su primer deceso y Singapur el decimonoveno desde el comienzo de la epidemia. Y los números seguían subiendo ayer.
El efecto más espectacular de esta epidemia del Sras se hizo sentir ayer en Pekín con el cierre de cines, cybercafés y bares de karaoké, por orden de las autoridades que quieren prohibir los lugares de reuniones. La nueva ministra de Salud china, Wu Yi, llamada "la Dama de Hierro", lanzó una campaña de movilización sin precedentes en materia de salud para tratar de controlar la epidemia, comenzando por amenazar con sanciones a todos los responsables que demuestren negligencia.
Después de la suspensión de escuelas por un mes, las autoridades decidieron cerrar la Universidad del Pueblo, la tercera en importancia en la capital china ante los temores de propagación de la enfermedad.
Tampoco casamientos
Dentro de las medidas destinadas a luchar contra la epidemia, los servicios municipales de la capital china suspendieron las inscripciones de los ciudadanos que quieran contraer matrimonio. Esta decisión, que comenzó a regir el sábado, está destinada a impedir la congregación de público para no favorecer la propagación del virus.
La India, segundo país del mundo después de China por el número de habitantes, superior a mil millones de personas, registró dos nuevos casos adicionales de neumonía atípica, uno en Bombay y otro en Calcuta, llevando a siete el total de casos declarados en este país.
Ante la falta de un remedio o vacuna, las autoridades sanitarias indias se han visto obligadas a poner en cuarentena a un número creciente de personas ya que el principal modo de contagio es el contacto con la persona enferma tras un período de incubación.
En Canadá, las esperanzas de una rápida erradicación de la neumonía atípica se esfumaron con la muerte de cuatro personas en 48 horas, aunque las autoridades reiteran una y otra vez que la enfermedad está controlada. "No detectamos otros contagios desde hace más de tres semanas, y ahora vamos a quedar como una de las zonas de más riesgo, es realmente triste", lamentó el microbiologista Donald Low ante la televisión nacional CBC el sábado, tras la difícil jornada que vivió Toronto.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) avergonzó a las autoridades canadienses, cuando el viernes mantuvo "muy firmemente" a Toronto en la lista negra de ciudades a evitar. Además, los tres nuevos muertos en un sólo día ensombrecieron las perspectivas de limitar la propagación del virus. Todos los decesos ocurrieron en la región de Toronto (capital de Ontario) que concentra la gran mayoría de los 344 casos detectados en el país.
Por su parte las autoridades de Taiwán anunciaron ayer la primera víctima mortal de neumonía atípica en el país. Y la presidenta de Filipinas, Gloria Arroyo, amenazó con instaurar penas de prisión para las personas que no respeten las medidas de cuarentena tomadas para prevenir la propagación de la neumonía atípica. (AFP)