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Propio de galopines

El bloque peronista que presido votó en contra de la suspensión de Omar Bonino, jefe de la Oficina del Consumidor suspendido en un bochornoso escrutinio que exhibe la abstención de 25 concejales sobre 39. La bancada oficialista que preside Liberati intentó dejar sin efecto el nombramiento de Bonino. No comparto la idea de quienes suponen que es un atajo para evitar reunir los 2/3 como manda la norma. Eso es propio de galopines y el bloque PSP tiene 8 ediles honestos. Al no prosperar, apareció Federico Steiger, profeta del empate, quien tras cerrarle el camino al oficialismo pronunció un encendido discurso proclamando la presunción de inocencia como piedra basal del derecho -Steiger es abogado- y reveló que los más brillantes juristas expertos en quiebras le dijeron que la rehabilitación del fallido procede automáticamente al año. Así, anotó un gol para Bonino pero enseguida, para empatar, propuso suspenderlo, o sea, presumiendo su culpabilidad. Una semana antes Bonino pidió licencia sin goce de sueldo y se la rechazaron dejándolo en el cargo. Ahora, 9 sobre 39 -¿no da vergüenza?- lo suspenden presumiendo su inocencia porque de entender que violó el artículo 25 de la ley 2756 debió ser cesanteado. Peor aún, lo congelaron enjoyado con la doctrina a su favor. Un papelón porque el autor del discurso más coruscante del jueves, una pieza de admirable solidez a favor de Bonino, votó para suspenderlo. Fue suspendido como consecuencia del temor de no hacer nada y de ser criticado por el periodismo. De cualquier manera, ese rosarino insigne que es patrimonio de la mejor historia argentina, Lisandro de la Torre, advirtió que la política no es para pusilánimes. No obstante, 70 años más tarde Fernando de la Rúa fue presidente.
Evaristo Monti, concejal peronista