Ruralistas santafesinos también le pegan a Lavagna

Carsfe rechazó la imputación de "voraz" que le asignó el ministro al campo. Otro fallo a favor del ajuste por inflación

La Confederación de Asociaciones Rurales de Santa Fe (Carsfe) se sumó ayer a la ola de repudios de sectores agropecuarios contra el ministro de economía, Roberto Lavagna, por su negativa a aplicar un ajuste por inflación al cálculo del impuesto a las ganancias.
La entidad, que estrenó ayer en Rosario la nueva conducción surgida de la unificación de las rurales del norte y sur de la provincia de Santa Fe, rechazó las declaraciones del ministro respecto de la "voracidad" del sector agropecuario que pide flexibilizar la política impositiva.
Lavagna dijo el martes en Rosario que el pedido de las entidades era por un "trato preferencial" y calificó de "voraces" a los dirigentes del sector. Desde Carsfe le contestaron que fue precisamente el campo el que aportó, vía las retenciones, el financiamiento de los programas sociales mediante los cuales el gobierno de Eduardo Duhalde pudo manejar la crisis social que estalló en diciembre de 2001.
Las declaraciones del ministro también motivaron el rechazo de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), adherida a CRA. Mientras tanto, las entidades y empresas del sector avanzan con la presentación de recursos de amparo en contra del pago de ganancias ficticias.
La Sociedad Rural Argentina (SRA) se convirtió esta semana en la primera organización gremial de alcance nacional que promueve una acción colectiva, mientras que en Confederaciones Rurales esa vía fue encarada pro distintas representaciones regionales.
Precisamente, la Justicia Federal de Tucumán hizo lugar ayer a la medida cautelar solicitada por la Sociedad rural de esa provincia y ordenó a la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) que se abstenga de promover cualquier reclamo administrativo o judicial contra los socios de la entidad, en cuanto a la diferencia que pudiera surgir por la liquidación del impuesto a las ganancias y su ajuste por inflación. La medida beneficia a unos 300 productores agropecuarios.
El cálculo del impuesto a las ganancias no es el único tema de fricción entre los agropecuarios y el ministro. La polvareda también se armó con la descalificación que hizo Lavagna respecto de la propuesta santafesina para cobrar regalías por el uso agrícola del suelo.
El diputado provincial radical Mario Ibaldi aseguró ayer que "el ministro Lavagna habla con la soltura de un técnico que vive de espaldas al país y desconoce cuál es la cruda realidad del sector agropecuario".
Ibaldi, corrigió también a Lavagna, cuando esté interpretó que es imposible la concreción de un tributo de ese modo por el tema de la propiedad de la tierra. "Que Lavagna no venga con interpretaciones jurídicas rebuscadas que sólo pretenden postergar una discusión fundamental para el desarrollo del país, cuando hablamos de regalías, hablamos de un concepto claro, que es el de reconocer el uso de los suelos, la pérdida de fertilidad de los mismos y el apropiamiento sin reparos por parte del Estado nacional de una cuantiosa suma de dinero".