Asunción. - Uno es investigado por el desvío de fondos del ejército, otro fue denunciado por torturas, un tercero es directivo de empresas acusadas de falsificación y contrabando, y otro más asesoró a banqueros que estafaron a miles de ahorristas. No se trata de la lista de los más buscados por la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) de EEUU, sino la de candidatos al Congreso por los principales partidos políticos de Paraguay en las elecciones generales del domingo.
La lista incluye a ex presidiarios, acusados de soborno, chantaje, financiación ilegal de campañas políticas y otros delitos. "Es verdaderamente tétrica la lista de congresistas", se queja el empresario y periodista Germán Martínez Vierci, un afiliado al gobernante Partido Colorado. "El partido no tiene un candidato presentable para el Senado hasta el lugar 21, que probablemente ya no entra entre los elegidos. La posibilidad de no sólo votar, sino además elegir, es una ficción mientras subsista el régimen de listas cerradas", dice el analista político Guzmán Ibarra.
"Con los candidatos que hay en cada partido, se pueden hacer varios mazos de cartas como las del presidente George W. Bush", añade, aludiendo al sistema de divulgación de las fotos de los 55 funcionarios de Saddam Hussein más buscados, cuyas fotos ilustran juegos de naipes.
Según las leyes paraguayas, los partidos políticos efectúan elecciones primarias previas a cada votación nacional entre facciones internas que se integran luego a una lista única de esa agrupación, que es presentada inalterable para el elector. El 27 de abril, el votante podrá optar por el candidato presidencial de un partido, y elegir un postulante a gobernador de otro, pero votando cualquiera de las listas de congresistas, éste dará su apoyo a todos los integrantes de esa misma lista.
Sorpresas
Por el lado del Partido Colorado encabeza la lista de candidatos el abogado Nelson Argaña, un apellido de abolengo dentro de la agrupación política, que sin embargo aparece denunciado por medios como ligado a un sonado caso de desvío de fondos del ejército. Argaña no ha sido acusado aún como partícipe en el caso, pero la pesquisa ha llevado al apresamiento de un general que estaba a su mando en momentos en que él era ministro de Defensa, entre 1999 y el 2001. De resultar electo no podrá ser acusado ni investigado durante sus cinco años de mandato.
"Esta es la explicación para semejante calaña en las listas del Congreso: ser parlamentario hoy es sinónimo de impunidad total y es por esto que el Congreso es un lugar apetecible para los peores de cada partido", sostiene el periodista y analista político Eduardo Arce. "Si no, que me diga lo contrario (el diputado oficialista Oscar) González Daher. El tiene asegurados cinco años de impunidad", agrega.
González Daher, presidente de la Cámara baja, fue acusado por el fiscal Alejandro Nissen de falsificar los documentos de importación de su ostentoso automóvil Mercedes Benz deportivo, que según el investigador, habría sido robado de un país vecino. Nissen fue destituido hace dos semanas por el Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados, un órgano político que juzga a fiscales y jueces y preside González Daher. La Cámara baja denegó el desafuero del político para ser juzgado por el caso, lo cual había sido pedido por Nissen. González Daher ahora postula al Senado en los primeros asientos del oficialismo.
Esta lista incluye al ex ministro del Interior Julio Fanego, acusado en juicio de urdir el secuestro y tortura de dos militantes de izquierda. El candidato a senador Jaime Bestard, aparece involucrado con Fanego en conversaciones telefónicas espiadas y publicadas por radioemisoras y televisión, presuntamente recaudando fondos desviados de empresas públicas para financiar la campaña presidencial del candidato Nicanor Duarte Frutos.
El diputado colorado Wildo Legal, de cuyo vehículo particular la policía antidrogas incautó 200 kilos de marihuana prensada a principios de año, es el primer aspirante a la reelección por su departamento, y es seguro que tendrá fueros por cinco años más. La lista oficialista incluye a enjuiciados por evadir impuestos, empresarios acusados de falsificar marcas internacionales, contratistas de obras públicas acusados de fraude, y otros casos que necesitarían libros enteros para ser enumerados.
Sin salida
El Partido Liberal, principal de la oposición, presenta una lista de aspirantes al Senado encabezada por Carlos Quinto Mateo, un abogado especialista en legislación económica que fue asesor del Banco General, una empresa cuya quiebra fraudulenta en 1995 significó estafa contra decenas de miles de ahorristas. Waldemar Zárate, un diputado liberal candidato a la reelección, fue judicialmente denunciado por chantajear a comerciantes e industriales del interior del país a cambio de "protección" contra multas impositivas.
Un informe "filtrado" a la prensa el año pasado por el Banco Central sindicaba a José Antonio Bergues, candidato a senador por el movimiento independiente Patria Querida como evasor de impuestos en operaciones comerciales.
Unace, el partido del ex general golpista Lino Oviedo, propone como candidatos a políticos que purgaron prisión en relación con el asesinato del vicepresidente Luis María Argaña en 1999, un ex viceministro prófugo de alegaciones de desvío de fondos, y hasta a ex camaradas en un intento de golpe en 1996. Oviedo está exiliado en Brasil desde el 2000.
Los partidos más pequeños no escapan al "síndrome agudo de impresentabilidad", como denomina Arce a las listas de aspirantes al Congreso.
Desgobierno parece un adjetivo adecuado para Paraguay, y todo indica que seguirá así por varios años. (Reuters)