El Fondo instala un "vigilante" en la Argentina

El Fondo Monetario Internacional (FMI) informó ayer que designó a uno de sus principales funcionarios para Argentina como representante permanente en el país.
El británico John Dodsworth, actual vicedirector del FMI para el hemisferio occidental, asumirá próximamente el cargo de la institución en Argentina y desarrollará sus funciones desde Buenos Aires. Actualmente, el Fondo mantiene una oficina en Capital Federal pero a cargo de un funcionario menor.
La designación del funcionario como representante permanente, anticipa la decisión del Fondo de vigilar de cerca al nuevo gobierno, de modo de asegurar la incorporación de las exigencias del organismo en las negociaciones para un acuerdo de largo plazo.
Dodsworth es uno de los tres funcionarios que trabajan en el equipo de Anoop Singh, el jefe del departamento del hemisferio occidental del FMI, que incluye a América latina. Los otros dos funcionarios son Charles Collins y Jorge Márquez Ruarte, quien también es argentino. Dodsworth se desempeñó anteriormente como representante principal del FMI en India, Corea del Sur e Indonesia.
"Es una persona de gran experiencia en un número de regiones, y dada la importancia de nuestra relación con Argentina, y creo que las autoridades de ese país tienen la misma opinión de su relación con el Fondo, designar una persona en ese cargo parecía lo apropiado", explicó el portavoz del organismo, Thomas Dawson.
En tanto, una misión del Fondo viajará a Buenos Aires posiblemente este fin de semana, o comienzos de la semana próxima, para continuar la revisión del programa económico firmado con Argentina en enero pasado, aseguró el portavoz. El acuerdo temporario entre el Fondo y el gobierno de Eduardo Duhalde, con vigencia hasta el 31 de agosto, no contó con dinero fresco pero permitió al país reprogramar vencimientos de deuda con los organismos multilaterales por hasta 11.000 millones de dólares.
El objetivo del Fondo es asegurar que Argentina comience a pagar lo más rápido posible a los acreedores privados internacionales, la deuda que dejó de cancelar en diciembre de 2001.
El gobierno recibió esta semana una motivación adicional para reestructurar su deuda pública, cuando una corte federal de EEUU falló que el gobierno de Eduardo Duhalde deberá pagar 8 millones de dólares en bonos a unos tenedores estadounidenses, informaron expertos. Se trata del primer fallo favorable a tenedores de bonos desde que la cesación de pagos.