Casilda. - La jueza penal de esta ciudad, Silvia Nogueras, dictó la falta de mérito a favor del ex intendente Carlos Muia por los presuntos delitos de malversación de fondos, aplicación indebida de caudales y abuso de autoridad. La causa data de 2000, cuando se lo denunció por irregularidades detectadas en su último año de gestión tras una auditoría pedida por su sucesor, el actual intendente Eduardo Rosconi al asumir en diciembre de 1999.
Muia fue acusado de haber girado en descubierto sin autorización del Concejo, emitir cheques diferidos y utilizar un cuenta corriente a su nombre y de un familiar para pagar obligaciones municipales. Pero la magistrada consideró que "no hubo actividad dolosa" por parte de Muia ni de su entonces secretario de Hacienda, Marcelo Isern.
La resolución de Nogueras fue cuestionada por el fiscal Juan Carlos Curto, quien anticipó a La Capital que apelará en caso de dictarse un sobreseimiento. "Pedí medidas para revertir esta decisión porque estoy convencido de que hay elementos suficientes para procesar (a Muia) por el delito de peculado", señaló (ver aparte).
No hubo dolo
"No veo actividad dolosa, ya sea dándole a los caudales una aplicación diferente o desviando los bienes públicos fuera de la administración o, en definitiva, abusando de la autoridad", consideró en su resolución Nogueras, para quien la operatoria investigada es "transparente ya que consta en la contabilidad del municipio, concuerda con los resúmenes bancarios y además la perita oficial no hizo observación alguna".
Antes de terminar su mandato en diciembre de 1999, Muia libró unos 260 cheques diferidos con vencimiento entre el 12 de ese mes y junio de 2000. Los más de 260 mil pesos fueron pagados por la administración Rosconi. No obstante, la jueza dice haber advertido que "esa mecánica no era desconocida por el Concejo, pudiéndose interpretar que si bien no existió una autorización expresa del cuerpo hubo un consentimiento ya que no formuló ninguna crítica en su momento".
La declaración del ex presidente del Concejo, Daniel Lucci, parece haber sido clave para que Nogueras considere que los ediles conocían el manejo contable del municipio y no actuaron oportunamente. Sobre las cuentas bancarias a nombre de Muia y de un familiar para cumplir con obligaciones municipales, la jueza indicó que "todas las operaciones están registradas en el sistema contable" y descartó que esa acción signifique peculado.
No obstante, la magistrada casildense aclaró: "Como recurso de tipo financiero no lo comparto para la administración pública pues se debe exigir al funcionario la regularidad y transparencia en el desarrollo de su actividad, evitando equívocos innecesarios, como en este caso, frente a la opinión pública". Asimismo, planteó en su resolución que le llamó la atención que "no fue el Concejo sino un concejal a título personal, el actual presidente del cuerpo, Juan David Alonso, quien presentó la denuncia".
La Ciudad
