cartas

Un pueblo con problemas

Tiempo de elecciones es como decir todo vale, el todo pasa, todo queda en olvido. Es muy frecuente escuchar estas frases, pero la gente común de Arroyo Seco no se olvida de sus problemas, no se olvida de la obsoleta e ineficiente actividad política, tanto ejecutiva como legislativa, de quienes hoy y desde hace muchos años lamentablemente conducen los destinos de nuestra ciudad. La mayoría de los vecinos paga sus impuestos y tienen que cargar con la pesada carga de quienes no lo hacen por amiguismo político; el pueblo de Arroyo Seco tuvo que cargar con la deuda generada por el Concejo Municipal sin que a ninguno de los concejales se les moviera un pelo; tenemos que aguantar el pésimo y desastroso tránsito de la ciudad sin soluciones; tenemos que aguantar que los "señores grandes empresarios" estén colgados de la luz mientras el simple vecino paga como puede; desde hace años que no se le da solución al problema de las aceiteras sobre ruta 9 que generan un caos de tránsito en época de plena cosecha; tenemos que aguantar la gran cantidad de robos inducidos por entregadores de la ciudad ocasionando una psicosis general en la población; tenemos que aguantar la mala distribución de los planes sociales, haciendo de esto un triste juego político. Cuántas cosas podríamos enumerar y lamentablemente otra vez en época de campañas políticas volvemos a ver las mismas caras de siempre, las que a través de los años no han sabido brindar una mejor gestión política y mejor calidad de vida a la población, simplemente lo han hecho en su propio beneficio.
Diego Pagano