El Departamento de Defensa estadounidense no prevé ofrecer una compensación financiera ni a los civiles heridos en la guerra de Irak ni a los familiares de los civiles muertos en ese conflicto. Esta negativa se da pese a que el Congreso de Estados Unidos permitió el pago de compensaciones en el marco de un total de 2.500 millones de dólares que aprobó para reconstrucción y ayuda humanitaria en el país del golfo Pérsico. Esos fondos podrían utilizarse también para resarcir a los iraquíes por daños a la propiedad. El Pentágono tampoco tiene intención de contabilizar la bajas de civiles en la contienda de Irak, lo que los militares estadounidenses llaman "daños colaterales". Los militares estadounidenses creen que sería demasiado complicado determinar con exactitud el número de civiles muertos, debido a los problemas para diferenciar entre las víctimas caídas por el empleo de la fuerza por Estados Unidos y la empleada por los iraquíes, declaró el portavoz. (DPA)
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La Ciudad
