La publicación del código genético de un nuevo virus tenido por responsable de la neumonía atípica es para los investigadores el punto de partida para elaborar exámenes de diagnóstico confiables que permitan identificar medicamentos que lo debiliten y encarar el desarrollo de una vacuna. Dos equipos, uno en Canadá y otro en Estados Unidos, decodificaron la secuencia genética del virus, por lo que ahora será posible penetrar su coraza con el objetivo de dominar la epidemia del síndrome respiratorio agudo severo (Sras).
"Los laboratorios de investigación pueden utilizar esas informaciones para probar medicamentos antivirales, establecer la base del desarrollo de vacunas y preparar pruebas de diagnóstico que permitan una rápida detección", explicó Julie Gerberding, directora del Centro de Control de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.
De acuerdo a la investigación, el presunto culpable pertenece a la familia de los coronavirus, denominados de esta manera por la forma en corona de estos organismos, hasta ahora sólo conocidos por su papel secundario en un simple resfriado.
El virus se mostró fácil de cultivar en laboratorio, pero su secuencia genética revela diferencias con otros virus de la misma familia.
A partir de un paciente enfermo de Sras, se hizo proliferar el virus con la utilización de células de riñones de monos verdes africanos, para reproducir el ácido ribonucleico de éste. Y su secuencia genética comprende 29.727 nucleótidos.
El código genético del virus -extraído de dos enfermos separados por miles de kilómetros- es casi idéntico en ambos casos, con una diferencia de apenas 15 nucleótidos sobre casi 30.000.
Por su parte, el laboratorio del Ejército de Estados Unidos en Fort Detrick (Maryland, Estados Unidos) comenzó una serie de ensayos para someter el coronavirus a 2.000 antivirales ya comercializados, en la búsqueda del medicamento adecuado para atacar el virus.
Al respecto, Anthony Fauci, director del Instituto de alergias y enfermedades infecciosas (Niaid) de Estados Unidos, mencionó que entre los medicamentos probados, el interferón alfa es una pista interesante.
En este sentido, la pulverización nasal de interferón alfa se mostró eficaz durante investigaciones de los años 80 contra los síntomas del resfriado que causan los coronavirus. Pero esta pista se abandonó porque irritaba fuertemente las fosas nasales, aunque ahora frente a la amenaza del Sras se vuelve a considerar.
También, los científicos examinan el potencial de los inhibidores de proteasa que impiden la réplica del virus al bloquear ciertas enzimas, un ataque eficaz para controlar el virus del sida y se espera un comportamiento similar ante el coronavirus.
Hong Kong: 9 muertos en un día
En todo el mundo, el Sras ha matado a 154 personas e infectado a 3.235, según los datos más recientes de la OMS. Se estima que la enfermedad se originó en la provincia china de Guangdong. En Hong Kong, una mujer embarazada y dos mujeres saludables, todas de alrededor de 30 años, murieron ayer junto con otras seis personas a raíz de este mal. Esta cifra, la más alta de decesos en un solo día en esa ciudad, lleva el total de fallecidos por Sras allí a 56, lo cual generó dudas acerca de la efectividad del tratamiento aplicado.
Adicionalmente se registraron otros 42 nuevos casos de infecciones, once de los cuales son de trabajadores de la salud, lo cual lleva el total de casos en Hong Kong a 1.232. Los expertos se manifestaron preocupados por la cantidad de víctimas jóvenes, lo que ha llevado a varios de ellos a pensar que el virus está mutando y volviéndose resistente a las drogas.
Entretanto, ayer se conoció un caso sospechoso en Italia, donde los médicos realizarán una autopsia a un hombre de 56 años que murió en Nápoles de problemas respiratorios poco después de regresar de un viaje por Tailandia. (Télam y DPA)