Buenos Aires.- Carlos Carrascosa, detenido desde ayer acusado por el homicidio de su mujer María Marta García Belsunce, volvió a declararse inocente ayer al prestar declaración indagatoria ante el fiscal Diego Molina Pico.
Durante las dos horas y media que estuvo frente al fiscal que lo acusó de asesinar a su mujer, fingir que la muerte era producto de un accidente y de instrumentar maniobras para lograr que el crimen quedara impune, Carrascosa dijo que era inocente y aportó presuntos elementos de prueba a su favor.
Entre las medidas que aceptó el fiscal Molina Pico, consta la entrega de su registro de ADN y su ofrecimiento voluntario a que le extraigan sangre para que la comparen con las manchas hemáticas halladas en el lugar del crimen y resguardadas por lo peritos.
Además, Carrascosa presentará como nuevos testigos a dos ex compañeros de la Marina Mercante para probar que él no tenía un buen manejo con las armas de fuego como se sospechó durante la investigación.
"Además solicitamos otras medidas de prueba que no queremos mencionar por el momento para que tengan su real efecto", dijo Marcelo Nardi, uno de sus defensores, al término de la indagatoria.
Uno de los puntos que Carrascosa se preocupó por desmentir fue que no estuvo minutos antes o después del crimen de su esposa en el restaurant del Club House del country Carmel, como lo declararon tres testigos que apoyaron los fundamentos para que se ordenara su captura como autor material del homicidio.
Alba Máxima Benítez, dueña de la concesionaria del Club House, y el mozo Gerardo Oberndorfer, declararon que Carrascosa estuvo en ese lugar entre las 18 y las 19 -cuando ocurrió el crimen- sentado en una mesa bebiendo café y lemonchelo. Además, la presidenta de Missing Children, Susan Prilick declaró ante el fiscal que en una charla telefónica, la masajista Beatriz Michelini, le dijo que había pasado a buscar a Carrascosa por ese restaurant cuando llegó al country para hacerle masajes a María Marta.
El fiscal Molino Pico indagó a Carrascosa por el delito de homicidio calificado por el vínculo, penado con prisión o reclusión perpetua y no por encubrimiento como lo hizo por primera vez.
Carrascosa se había entregado antenoche en una casaquinta de Escobar al conocer el pedido de captura ordenado por el juez de Garantías de San Isidro, Diego Barroetaveña.
El fiscal Molina Pico lo acusa de disparar seis balazos contra su esposa el 27 de octubre del año pasado en el country Carmel de Pilar, modificar la escena del crimen, instalar la idea de un accidente y armar una coartada para que el asesinato quedara impune.
Molina Pico cree que Carrascosa mintió en sus declaraciones anteriores y que no puede justificar qué hizo entre las 18 y las 18.30, el horario en el que se estima ocurrió el crimen, y que su aparición en el Club House era una primera coartada desechada para hacerse ver y demostrar que no estaba en su casa cuando ocurrió el crimen.
En una entrevista que dio a un noticiero, Carrascosa sostuvo su inocencia y la del resto de su familia y apoyó la hipótesis de que su mujer fue asesinada porque reconoció a un ladrón que entró a su casa. (Télam)
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