Año CXXXVI
 Nº 49.808
Rosario,
jueves  10 de
abril de 2003
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Una nueva maniobra del estafador serial que opera en la ex Aduana
Fingió ser abogado y engañó a dos comisionistas con una venta falsa de agroquímicos

Otro caso de estafa perpetrada por una banda que se mueve en torno a la Aduana de Rosario se conoció ayer. Los damnificados, que rehusaron denunciar los hechos ante la policía, fueron dos comisionistas de la ciudad bonaerense de Colón y la localidad de Hughes, en el departamento General López, quienes fueron despojados de 8 mil pesos con la promesa de recibir agroquímicos a precio de oferta.
Según informó el semanario Colón/12, el operador de la maniobra se presentó como el abogado Alberto Monticello, con domicilio en un departamento de Pellegrini al 1100, en Rosario. Lo singular es que una de las víctimas hizo gestiones por su cuenta y averiguó que el nombre del delincuente era Juan Carlos Tolosa, que en realidad es una mezcla de dos apodos utilizados por el estafador en sus maniobras, donde dijo ser inspector de aduanas y que tuvieron como víctimas a empresarios y comerciantes de Salta y Buenos Aires.
El caso trascendió luego de que este diario informara sobre la estafa de que fue víctima el productor Miguel Plascencia, de la ciudad salteña de Metán. Quien resultó despojado de 3 mil pesos cuando negociaba la compra de una cosechadora Massey Ferguson, en la antigua Aduana.
En el último episodio conocido, el estafador llamó por teléfono a las víctimas y les ofreció comprar una partida de agroquímicos por 8 mil pesos, la mitad del precio corriente. La mercadería, dijo el delincuente, se encontraba en un depósito fiscal de la Aduana de Rosario y procedía de un secuestro realizado por la policía.
El estafador, que desde hace más de un año burla a la policía rosarina, fue descripto por una de las víctimas como un hombre de 50 años, de 1,70 metro y cabello medio canoso, características coincidentes con las ya apuntadas por otros damnificados.
Por otra parte, el estafador hizo gala de histrionismo, ya que en medio de las conversaciones "recibió un llamado a su celular e inició una charla con gestos ampulosos, aludiendo a que tenía que sacar a dos presos de la cárcel de Coronda".
El supuesto Monticello ofreció garantías para la seguridad de los compradores, pero al mismo tiempo deslizó que había que pagar un soborno para retirar la mercadería. En definitiva, se convino una transacción en dos pagos, que se hicieron en Colón y en Rosario.
En Rosario, las víctimas se entrevistaron con el supuesto secretario de Monticello, un hombre de unos 30 años que dijo llamarse Sebastián y los citó en un bar frente a los Tribunales. Posteriormente el falso abogado dijo que había despedido a su supuesto secretario.
El cabecilla de la red de estafadores ha utilizado además los alias de Mauricio Gustavo Tolosa, Juan Carlos Peralta e Ibáñez. Se ha presentado como titular de la empresa Distribuidora del Sur, con casa central en Camino Guereño sin número, de Villa Gobernador Gálvez (una calle sin edificaciones), y con sucursal en Pergamino.
En tanto, el jefe de la División Fiscalizaciones Aduaneras, Roberto Manias, aseguró que en la Administración de Aduanas "estamos alerta a este tipo de situaciones y por eso en el último caso han llevado al damnificado fuera de nuestro ámbito".
"Recomendamos a las personas que deban hacer cualquier trámite u operación que llamen al teléfono de Aduana Escucha, 0800-9992347, o presentarse en cualquier dependencia de la Aduana para cerciorarse de que aquello que le venden se puede comercializar legalmente", dijo Manias.
En Rosario, los interesados pueden presentarse en Alvear 149, tercer piso, donde funciona la División Fiscalizaciones Aduaneras.



La ex Aduana fue escena de las maniobras de estafa. (Foto: Silvina Salinas)
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