| | Argentino, obligado a ganar
| Temperley llega como banca ante un más que nunca necesitado Argentino. Después de una semana en que se habló mucho acerca de la supuesta lesión de Cristián Campestrini, los salaítos en lo único que piensan ahora es poder sacar un buen resultado ante los celestes que les permita seguir manteniendo vivas las ilusiones de mantenerse en la Primera B. Los pibes de Sorrento saben que dependen exclusivamente de sí mismos para obtener una victoria o un empate, que a esta altura sería bienvenido. El partido comenzará a las 15.30 en el José Olaeta y en juego habrá mucho más que los tres puntos. Las dudas que mantuvo durante toda la semana el entrenador de Argentino, si atajaba Mauro Andrada o si volvía a la titularidad el Cristián Campestrini, y si por el carril central jugaba Enzo Sandoval o Matías Bravi en lugar del suspendido Alejandro Rubio, parece ser que quedaron despejadas. En consecuencia, fuentes salaítas indicaron ayer que es un hecho la vuelta a los tres palos de uno de los mejores jugadores del plantel, el nicoleño Cristián Campestrini, y que Sandoval estará entre los once que tratarán de lograr lo que para muchos es una utopía: ganarle a Temperley, de buena posición en el grupo A. Argentino hace cinco fechas que gana como local. Para colmo Temperley cosecha seis partidos invicto, encima hace tres cotejos que no recibe goles y como si esto no bastara hace cuatro que no pierde como visitante. En un principio esto aparece como una presión extra para ese puñado de pibes que hoy dejarán todo para darle una alegría al necesitado pueblo salaíto.
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