Aquí aprendí mucho", afirmó el psicólogo alemán, Jarg Bergold luego de su última visita a la ciudad. Además de presentar un exitoso modelo de atención de emergencias que funciona en Berlín, el psicólogo recorrió el Centro de Atención a la Comunidad (ver recuadro) y reconoció la importancia del trabajo interdisciplinario y comunitario que se realiza en Rosario. "Me impresiona el trabajo comunitario que hace la gente, no sólo en Rosario, sino en toda Latinoamérica", remarcó Bergold a La Capital. Y lo diferenció de la tarea que se desarrolla en tierras sajonas, "donde rige la idea de que el hombre se desarrolla individualmente", agregó.
El psicólogo alemán destacó la labor de los profesionales que trabajan en forma interdisciplinaria en la comunidad. "Yo fui psicoterapeuta, pero creo que el psicoanálisis no es para la mayoría de la gente. Es para quienes más o menos tienen dinero y recursos. Aquellos que no los tienen deben pensar en otras posibilidades de tratamiento, como las que ofrecen aquí los profesionales que trabajan junto con la comunidad".
"En Rosario aprendí algo que me sirvió mucho", confió. Y sobre el particular recordó que mientras dictaba una charla sobre salud mental en Rosario, alguien se paró y le dijo que "la salud mental empieza primero por tener agua potable, un techo, algo para comer y zapatos para que los niños puedan ir a la escuela".
Esa intervención le permitió reconocer que en Europa "no se trabaja interdisciplinariamente. Dada la abundancia de recursos, no existe la preocupación de que la gente tenga o no agua potable. Allí se concentran en lo suyo, mientras que aquí aprendí que puede ser de otra manera".
Seguidamente reconoció que en Berlín comenzó un trabajo comunitario "con gente pobre, que igualmente no lo es tanto como aquí", aclaró. Y al respecto agregó que hoy la capital alemana recibe numerosos inmigrantes de los países del Este y turcos que llegan en busca de mejores condiciones de vida. "A raíz de esto, Berlín es la tercera ciudad con mayor cantidad de habitantes turcos en el mundo", agregó.
Atención de crisis
Si bien Bergold rescató la tarea interdisciplinaria que realizan los profesionales argentinos, cuestionó a las instituciones porque no trabajan en forma conjunta. Esto, según el psicólogo alemán, "posibilitaría disminuir los costos sanitarios". Y como ejemplo de ello, mencionó el sistema de atención de emergencias que funciona en Berlín. "Allí las instituciones funcionan en red para brindar un servicio completo", dijo.
El modelo alemán, presentado por el psicólogo durante su visita a Rosario, funciona hace tres años, y si bien no existen datos científicos que comprueben su eficacia, "sí sabemos que la tasa de suicidio comenzó a descender", sostuvo.
La metodología citada funciona las 24 horas y articula a instituciones como la policía, los hospitales y los centros de crisis de la ciudad alemana, que atienden situaciones de angustia o depresión hasta violencia familiar y suicidio. Si la policía detecta una persona que intenta suicidarse, se comunica con el centro de atención de crisis y acudirá un profesional que intentará tomar contacto con el afectado.
Estos centros, distribuidos en la ciudad, brindan también atención psiquiátrica, lo que permitió que disminuya la hospitalización.
El psicólogo Saúl Fuks, director del Ceac, explicó que "si bien en Argentina es muy difícil coordinar el trabajo de las instituciones, desde el Ceac se intenta hacer algo semejante trabajando con los centros barriales de la zona, las parroquias, Cáritas, la policía y los profesionales, pero aquí no es una política de Estado como en Berlín". El psicólogo alemán se despidió dejando un mensaje a las instituciones argentinas: "juntaos".
Nuevas corrientes
El psicólogo alemán, Jarg Bergold, advirtió como una "verdadera perversión" que en Argentina el psicoanálisis sea tan fuerte, especialmente la corriente lacaniana. "Me parece importante que los profesionales descubran otras teorías y traten de incorporarlas. Esto les permitirá trabajar más prácticamente. Muchos proyectos elaborados desde el psicoanálisis pecan de teóricos. Son muy buenos, pero están muy lejos de la realidad. No comprendo cómo sucede ésto en un país urgido por proyectos realizables. No desestimo la corriente como una orientación en la Universidad, pero no sirve a la hora de hacer proyectos", afirmó.
Por su parte, Saúl Fuks, psicoanalista y docente de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Rosario, afirmó que si bien en Argentina existe una hegemonía en la utilización del psicoanálisis, "desde la Universidad existe una apertura hacia otras corrientes".