Caso Cloque, un asesinato todavía sin condena

Familiares de Ariel Colque, muerto en un presunto caso de gatillo fácil, denuncian que los acusados están en libertad

Hoy se cumplen cinco años de la muerte de Ariel Colque, un chico de 16 años que recibió un balazo en la espalda cuando era perseguido por dos policías. Los familiares están consternados y aún reclaman justicia porque aseguran que los dos agentes salieron en libertad por la aplicación de la ley del dos por uno.
Cuando ocurrió el suceso, el 30 de marzo, Ariel cursaba el primer año de la secundaria en el establecimiento educativo que funciona en la Prefectura Naval. En la madrugada de ese día, el muchacho fue baleado y brutalmente golpeado en Magallanes al 2400, luego de ser interceptado por los policías Jorge Vásquez y Darío José Protti. La versión policial intentó incriminar a Colque en el intento de robo a una casa de Cochabamba al 5600, lo que luego fue descartado por la investigación del trágico episodio.
Desde el principio, los familiares del adolescente aseguraron que "Ariel estaba desarmado y que no tuvo intervención" en el atraco. Y que había sido asesinado a quemarropa cuando estaba de espalda a los efectivos".
Ariel fue internado en el Hospital de Emergencias y permaneció 45 días en terapia intensiva hasta que el 18 de mayo de 1998 falleció luego de sufrir dos paros cardíacos.
En agosto del 2000, el juez de instrucción Jorge Eldo Juárez dictó el procesamiento de Vásquez y Protti bajo la acusación de homicidio simple. En la resolución, el magistrado señaló que el joven había recibido un disparo efectuado desde corta distancia. También se estableció que se "había plantado un arma para simular un enfrentamiento.
En noviembre del mismo año, la Sala IV de la Cámara de Apelaciones confirmó el procesamiento de los agentes.
Desde el día de su fallecimiento, la madre de Ariel, Ramona Antonia Colque, está soportando un calvario. Bajó de peso y está enferma. Y cuando intenta recordar el episodio no puede disimular el dolor que le provocó la absurda muerte del muchacho.
La mujer explicó que Vásquez y Protti fueron excarcelados por la aplicación del Pacto de San José de Costa Rica que establece, según explicó una fuente judicial, que, de acuerdo a la ley 24.390, una persona no puede estar más de tres años en prisión sin sentencia.
Ariel se ganaba la vida trabajando en una cadetería de la calle Spiro al 300 bis, a pocos metros de su casa. "Era el único sostén económico de su familia", indicó una tía.
Los dos policías que estuvieron involucrados en el caso de gatillo fácil registran antecedentes penales. Vásquez, que revistaba como cabo en la seccional 16ª, estuvo acusado de exacciones ilegales, favores dolosos, defraudación y lesiones, a raíz de hechos producidos entre diciembre de 1994 y marzo de 1997.
Darío Protti, numerario de la Alcaidía de Jefatura, estuvo imputado en dos hechos de facilitamiento de evasión de presos y por robo, en casos ocurridos ente 1989 y 1995.
Por su parte, Roberto Vásquez, hermano de uno de los agentes, disfrazó como robo a su vivienda lo que fue una desinteligencia, terminada en escándalo, por una negociación de estupefacientes.

Ariel Colque tenía 16 años cuando cayó muerto.