Osvaldo Flores / La Capital
Alcorta.- Ni la persistente amenaza de lluvia logró mellar el reclamo de la comunidad de este pueblo para que se esclarezca el crimen de Ana Rótolo, la mujer de 39 años que el pasado sábado 15 fue asesinada de tres balazos. Cerca de 200 personas desafiaron anoche a la tormenta y marcharon silenciosamente por las calles del pueblo, en una movilización de la que participó también el presidente comunal Vicente Martelli.
"Codo a codo, hombro a hombro, por justicia", decía el cartel pintado con aerosol que encabezó la marcha, sólo unos pasos más atrás de una ambulancia del Samco que con sus luces encendidas mostró el camino del reclamo, el mismo recorrido que hace nada más que unos días también desandó alegremente Ana Rótolo al frente de su comparsa de carnaval.
Este segundo reclamo por justicia se inició en la plaza Albert Sabin, con el rezo de un Padrenuestro y antorchas encendidas, mientras los comercios de la zona cerraban sus puertas y el clima de estupor e incredulidad se adivinaba en el ambiente.
"Es que no sólo estamos tristes, sino también conmocionados. Es la primera vez que ocurre una cosa como ésta en Alcorta, y no queremos que vuelva a suceder. Y todos sentimos la necesidad de no quedarnos de brazos cruzados y en casa, por eso salimos a pedir que este horrible crimen se esclarezca cuanto antes y se haga verdadera justicia", coincidieron las amigas más íntimas de Buby, como todo el pueblo conocía a la víctima.
"Buby te queremos" y "Justicia para Buby" decían otros carteles, algunos de ellos en las manos de chicos que integraron la comparsa de Ana. Mientras la marcha avanzaba por bulevar 25 de Mayo, más vecinos consternados sumaban su silencioso reclamo.
"Creo que la justicia y la policía están trabajando bien para resolver rápidamente esta atrocidad que nos ha conmovido a todos. Por esa misma fe que tengo le pido al pueblo que tenga tranquilidad, y que si alguien sabe algo que ayude a la Justicia para que esto se pueda esclarecer cuanto antes", pidió el presidente comunal Vicente Martelli.
"Estamos todos muy sorprendidos por lo sucedido -añadió-. De todas maneras Alcorta sigue siendo un pueblo tranquilo y seguro. Claro que lo ocurrido nos ha conmovido profundamente, pero quienes estamos cerca del accionar de la Justicia y la policía sabemos que se está obrando bien".
A medida que los testimonios se sucedían en el grabador del cronista, un detalle poco común en estos casos llamaba la atención: que los lamentos por el horrible destino de la víctima corrieran paralelos a la simpatía que mucha gente siente por el único sospechoso del crimen, Diego Fioretti.
"En estos últimos tiempos, a Buby se la veía plena de felicidad y todos nos alegrábamos porque era una mujer de una conducta intachable. Y el muchacho, Fioretti, también es una persona buenísima, así que ahora no sabemos qué pensar cuando es el único detenido por lo que pasó. Si hasta se podría decir que Fioretti era el amigo del alma de Buby", dijo una señora que pidió reserva de su identidad.
Mientras recorría las últimas cuadras junto a la movilización, José Luis Lertora, otro de los amigos de Ana, todavía no podía salir de su estupor por lo sucedido. "Es un impacto muy grande, y lo único que pedimos es que su crimen se esclarezca lo antes posible, para tranquilidad de sus padres y su familia, y también para la gente de los pueblos de la zona, que no están acostumbrados a cosas como esta", dijo.
Los relámpagos cada vez más cercanos recortaban fantasmas en la noche de Alcorta cuando la silenciosa marcha culminó en el mismo lugar que había partido minutos antes. Y que será el mismo escenario donde el próximo viernes la gente volverá para seguir reclamando justicia.
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La Ciudad
