Pelea por la reestatización del puerto de Santa Fe

El ente administrador decidió rescindir el contrato de la concesionaria, que anticipó que "resistirá" la decisión

Un fuerte conflicto amenaza el futuro del puerto de Santa Fe, a partir de la decisión del ente que administra esa terminal de rescindir, a partir del lunes próximo, el contrato firmado con la firma concesionaria.
Roberto Doldán, director de la concesionaria Terminales Portuarias Santafesinas, que tiene a su cargo la explotación del puerto, denunció que la decisión del ente es una "velada estatización" de esa estación fluvial y anunció que "resistirá" la decisión tomada por el organismo.
Doldán dijo "estar sorprendido" por esta decisión, mientras que Angel Malvicino, empresario santafesino vinculado a la concesión, se reunió ayer al mediodía con el gobernador Carlos Reutemann, a quien le pidió su mediación en el conflicto.
Doldán denunció que detrás de la decisión existe "una velada estatización" y no descartó concurrir a la Justicia en defensa de los intereses de la empresa. Reutemann instó a las partes a no judicializar el conflicto y a abrir una instancia de negociación. El anuncio sobre el cese del contrato fue realizado por el titular del ente, Ricardo Luján, quien manifestó que el cese debía operar a partir del lunes, interpretando que no se han cumplido con las cargas previstas en el contrato y otras medidas similares.
"Hay incumplimiento de las cargas previstas en el contrato y el directorio tomó la decisión de rescindirlo", dijo.
Por su parte, el representante de Terminales Portuarias Santafesinas recordó que la medida no se puede tomar de inmediato porque previamente deberían realizarse procedimientos relativos al desalojo y calificó la decisión de "acto irresponsable" que se intenta adoptar a tan poco tiempo de que se produzca la asunción del nuevo presidente de la Nación.
"Vamos a resistir la medida porque hay cien familias que viven de esto", dijo Doldán, quien admitió estar sorprendido por el apuro de rescindir el contrato cuando el concesionario cumplió con su principal obligación, como es el pago del canon. El contrato de concesión tiene una duración de 30 años y el ente debe controlar periódicamente si las metas preestablecidas se han cumplido. Pasado mañana concluirá uno de esos períodos y directivos del ente anticiparon que harán cesar la explotación.
Doldán recordó que el contrato tiene aún 27 años de vigencia y aseguró que si el ente portuario mantiene su decisión se irá a la Justicia para que se demuestre si se han cumplido o no las metas. "Estamos dispuestos a promover juicios contra el Estado y contra los funcionarios", expresó el ejecutivo. Calificó de "cachetada a la realidad" la medida que se quiere aplicar, cuando están ingresando al puerto de Santa Fe tres toneladas de cereales por día.
Doldán tiene previsto reunirse el martes con legisladores provinciales para hacerles conocer el punto de vista de la concesionaria. "Nos proponemos defender nuestra posición hasta lo último, porque lo que parece es que el ente quiere manejar el puerto mientras se habla de un posible traslado que demandaría no menos de diez años de ejecución".