Mauricio Maronna / La Capital
El gobernador Carlos Reutemann intentará que la feroz pelea justicialista por la Presidencia de la Nación no meta la cola en la provincia de Santa Fe. Pero mientras todas las miradas apuntan al cronograma que desdoblará las elecciones para designar jefe de Estado, gobernador y legisladores nacionales, entre otros cargos, muchos reutemistas no pierden de vista las internas partidarias que deberán realizarse el 29 de junio próximo para la integración de las listas de candidatos a diputado y senador. Aunque todos los dirigentes del PJ consultados sobre la fecha de vencimiento de la presentación de las nóminas optaron por un sugerente hermetismo, La Capital pudo saber que el titular de la Casa Gris tiene decisión tomada: el plazo definitivo para presentar las listas vencerá pocos días antes del eventual ballottage, que tiene como fecha el 18 de mayo. La posición, que no será admitida públicamente, obedece a la estrategia reutemista de evitar que un triunfo de Néstor Kirchner, Carlos Menem o Adolfo Rodríguez Saá le haga perder el dominio territorial y político a la hora de designar a los postulantes. "Imagínese que el futuro presidente querrá echar mano de su legitimidad para obligar al Lole a que ponga a tal o cual referente", se animó a reflexionar en voz alta un internólogo justicialista. "Reutemann sabe que si Kirchner resulta electo presidente subirán las acciones de (Jorge) Obeid. El Turco es el as de espada que tiene Lupín en la provincia", agregó. El gobernador se jugará gran parte de su destino en las elecciones a diputado y senador nacional, máxime si encabeza la lista de candidatos para ingresar a la Cámara alta. En las últimas horas, el jefe del peronismo santafesino comenzó a evaluar los beneficios y desventajas que le significarían ingresar a una institución sumida en el desprestigio, incrementado aún más por el operativo salvataje hacia Luis Barrionuevo. Si la gobernabilidad no se consolida tras la asunción del próximo presidente, no son pocos los analistas que temen una fujimorización de la política. Como dijo el filósofo Tomás Abraham, "la Argentina está tiernita para el fascismo" tras la catarata de escándalos y el vínculo roto entre representantes y representados. El episodio Barrionuevo no hizo otra cosa que incrementar la pésima imagen que la mayoría de la sociedad tiene sobre el Parlamento, lo que constituye un abono provechoso para quienes quieran formar masa crítica para cerrar ese ámbito deliberativo. Se sabe que Reutemann no es hombre de lanzarse a pista sin antes conocer al dedillo las señalizaciones. Aunque la Casa Gris comience a parecerse a una romería en los próximos días (con dirigentes pidiendo lugares y lugarcitos en las futuras listas), el Lole sabe que la composición de las mismas debería dar respuesta a la renovación dirigencial que exige la sociedad. "Ya les mandó un mensaje a los legisladores provinciales: que ni piensen en repetir mandato", le dijo un legislador nacional a La Capital. Obsesivo hasta la médula, el gobernador sabe que más allá de la sucesión en la Casa Gris nada puede quedar librado al azar en la conducción del justicialismo santafesino y respecto a los nombres de los futuros representantes en el Parlamento. Por eso, la convocatoria a la junta electoral (programada para el 14 de abril) empezará a recalentar el ambiente. Los nombres de los candidatos a diputado y senador deberán ser públicamente conocidos antes del ballottage. ¿Cuántos serán los valientes que se animarán a competir contra una eventual boleta que lleve en tipografía gigante "Carlos Reutemann senador"? El Lole no les dará la oportunidad de jugar con los tiempos ni con el padrinazgo de quien sea presidente electo.
| ¿Quién se animará a competir con "Reutemann senador"? (Foto: Silvina Salinas) | | Ampliar Foto | | |
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