Año CXXXVI
 Nº 49.790
Rosario,
domingo  23 de
marzo de 2003
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El policía que detuvo a un fotógrafo estuvo preso por gatillo fácil
El oficial Miguel Angel Vallejos fue involucrado en junio de 2000 en el homicidio de José Zauli y Oscar Udi

El oficial del Comando Radioeléctrico que detuvo en forma arbitraria a un reportero gráfico de La Capital y le inventó cargos para justificar el insólito procedimiento estuvo involucrado en un resonante caso de gatillo fácil ocurrido el 13 de junio de 2000 en un descampado del barrio Nuevo Alberdi.
Según lo indicado por voceros judiciales, el oficial ayudante Miguel Angel Vallejo o Vallejos fue uno de los tres efectivos que participaron de un presunto tiroteo en el que resultaron abatidos dos reclusos que se habían evadido de la sala penitenciaria del Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. Sin embargo, desde un primer momento, los familiares de los presos aseguraron que los prófugos habían sido fusilados.
Cerca de las 22 del miércoles 13 de junio del 2000, Eduardo Pablo David Farías, José Zauli y Oscar Ramón Udi escaparon de la sala donde estaban internados en el policlínico de Baigorria. El trío logró controlar a dos efectivos que estaban de custodia en el lugar a quienes robaron sus armas y finalmente los dejaron esposados.
Luego se subieron a un taxi que los llevó al barrio Rucci y después buscaron refugio en una zona humilde de Nuevo Alberdi. Según la versión oficial, la policía interceptó a Farías y Zauli en Bouchard al 3500, mientra que Udi logró escapar. Los dos reclusos se encontraron entonces con Vallejo o Vallejos y los agentes Rubén Roberto Flores y Javier Gastón Benítez y murieron baleados.
Sin embargo, el informe de la Unidad Regional II fue desacreditado por vecinos del lugar y familiares de los reclusos fallecidos. Todos coincidieron en que no hubo enfrentamiento sino un fusilamiento cuando los prófugos se entregaban con las manos a la altura de la nuca.
Ante la sospecha de que podía tratarse de un homicidio, el juez de instrucción Jorge Eldo Juárez ordenó la detención de los tres policías y pidió una serie de pericias balísticas a la Gendarmería Nacional. El 28 de septiembre de ese mismo año, el magistrado procesó por homicidio a los tres policías del Comando Radioeléctrico luego de recibir la declaración de una docena de testigos. Según esos testigos, no sólo no hubo tiroteo sino que los delincuentes tenían las manos en alto y ya se estaban entregando cuando los efectivos al mando de Vallejos dispararon a quemarropa entre 10 y 15 veces.
El 3 de marzo del 2001, después de estar ocho meses y medio en prisión, los tres policías recuperaron la libertad luego de que la Cámara de Apelaciones en lo Penal revocó el procesamiento por homicidio
El otro caso en el que participó el oficial Vallejo o Vallejos ocurrió el sábado 11 de enero, a media cuadra del diario. El reportero gráfico Néstor Juncos estaba tomando fotos frente a la galería La Favorita cuando fue abordado por el efectivo, quien exigió saber qué estaba haciendo el fotoperiodista. Juncos respondió lo que pareció obvio ("Estoy sacando fotos") y se identificó como reportero gráfico. Pero el oficial lo llevó preso.


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