| | Washington lanza su estrategia de información
| Gabriele Chwallek
Washington. - EEUU se propone mantener la situación bajo control durante la guerra de Irak no sólo en el frente militar. Desde el comienzo de la ofensiva se puso en funcionamiento una sofisticada campaña de información para que los medios se nutran de las fuentes "correctas". O como dijo un funcionario en Washington: a los medios se les debe facilitar la posibilidad de "difundir la verdad". El plan consiste en inundar a toda la prensa con informaciones sobre la guerra provenientes de fuentes estadounidenses. Datos de fondo, noticias del frente y entrevistas especialmente programadas para reporteros árabes: nada queda al azar. Los expertos ya hablan de la mayor estrategia de comunicación desplegada en tiempos de guerra. EEUU demuestra así haber aprendido la lección de la guerra en Afganistán. En esa oportunidad, Washington corrió el peligro de perder la "guerra de propaganda" contra los talibanes. La madrugada norteamericana se llenaba de declaraciones del enemigo denunciando "crímenes de la agresión estadounidense" contra civiles, que a causa de la diferencia horaria tardaban largo rato en ser desmentidas. El gobierno norteamericano estableció entonces centros de información en Washington, Londres y Pakistán para brindar datos con la máxima velocidad posible. Entretanto, la Casa Blanca cuenta ya con una Oficina de Información Global, responsable de fijar las pautas en el trato con la prensa. El portavoz de George W. Bush, Ari Fleischer, se comunicará desde allí cada madrugada con los medios, para que las primeras horas del día ya estén ocupadas con información propia. Las conferencias de prensa en el Comando Central estadounidense de Qatar están planeadas para la tarde local, lo suficientemente temprano para entrar en los noticieros del mediodía.Por la tarde, será el turno del Pentágono, que de paso dará material a los tradicionales noticieros de la noche europea. Las estaciones de la cadena estadounidense Voice of America son las encargadas de transmitir los mensajes de Washington a la población de Medio Oriente. Los funcionarios de la administración Bush han sido especialmente preparados para declarar ante la prensa árabe. (DPA)
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