Ayer se trabajó normalmente a pesar de los reclamos de la concesionaria

Hoy se realiza una reunión clave para liberar los fondos del puente a Victoria

El gobierno nacional define si deposita el dinero después de recibir una nueva amenaza de la empresa

Pablo R. Procopio / La Capital

Una reunión clave entre altos representantes del gobierno nacional y ejecutivos de Puentes del Litoral SA podría definir hoy si el Estado finalmente gira a la compañía los 10 millones de pesos excluyentes para poder continuar la conexión vial a Victoria. Desde la firma se manifestaron optimistas, mientras que el secretario de Obras Públicas, Jorge Desimoni, sostuvo que si bien la decisión de enviar el financiamiento ya está tomada, resta la certeza de que el dinero "vaya a la obra" y no sea embargado. El funcionario mostró interés en que los trabajos continúen pero también evidenció disgusto ante una nueva amenaza de frenar las tareas por parte de la empresa.
"Habrá que esperar el dictamen del área jurídica del Ministerio de Economía", advirtió Desimoni. La decisión oficial de enviar el dinero (parte de un desembolso total cercano a los 52 millones de pesos) está tomada, sólo que el gobierno quiere cerciorarse de que la asistencia financiera no será desviada.
Mientras tanto, los trabajos que como adelantó La Capital fueron retomados hace algunos días, siguieron su curso ayer a pesar de una amenaza de detenerlos. Es que Puentes del Litoral difundió en este diario una solicitada en la que se advirtió que "la obra se verá paralizada por desfinanciamiento total" en el caso de "no disponer del importe del anticipo comprometido". Una especie de ultimátum para que se efectivice el depósito en el Banco Nación.
En efecto, la firma constructora pretende que el gobierno gire los fondos a la Unión Transitoria de Empresas (UTE) que forma el consorcio que realiza la obra (Impregilo, Iglys, Hochtief, Techint, Benito Roggio, Iecsa y Sideco Americana) y no a otras cuentas de Puentes del Litoral.
Los principales referentes de la concesionaria en Rosario y Buenos Aires que hablaron con La Capital se mostraron optimistas respecto de que la situación se destrabará y luego marchará sobre rieles. Durante la tarde de ayer uno de los referentes habló desde el obrador local. "Capaz que mañana (por hoy) tenemos novedades; estamos esperando el dinero, nada más", sostuvo. En ese momento, en Capital Federal, se realizaba una reunión de directorio y se seguía el tema "minuto a minuto".
Una vez finalizado el encuentro se informó que hoy habrá otro cónclave, aunque esta vez en dependencias de la Secretaría de Obras Públicas de la Nación que junto a Economía y la Unidad de Coordinación de Fideicomisos de Infraestructura (Ucofin) ultiman los detalles para dar el okey o no al pago de la ayuda presupuestaria.
"Esperamos que se destrabe para seguir con la obra que ya iniciamos". subrayó una de las autoridades máximas de la compañía al tiempo que recordó que el gobierno "pidió una reunión mañana (por hoy) para terminar esto porque una parálisis perjudica a todos, más cuando la obra se ha reiniciado".
-¿Podría zanjarse la cuestión?
-Yo creo que sí; somos muy optimistas
La frase del directivo de Puentes fue un giro en cuanto a la situación de tensión que se había planteado a partir de la publicación de la solicitada que, a su vez, contenía la copia de una carta enviada a Obras Públicas en la que se avisaba de la suspensión de las tareas en la unión física.
En ese caso, desde la firma admitieron que se seguiría con la ejecución del puente hasta que alcanzaran los insumos (aproximadamente una semana) y luego el personal sería suspendido.
El ejecutivo recordó que "existe un convenio con una UTE subcontratista para que termine la obra" y que "efectivamente están embargadas tres o cuatro cuentas de Puentes del Litoral". Esto sirvió para explicar la necesidad de que el envío de los fondos sólo se realice a la UTE para evitar los embargos solicitados por la firma holandesa Boskalis-Ballast que construyó terraplenes.
En rigor, Puentes informó también que la UTE "ha realizado aportes económicos y contraído compromisos con terceros que no es posible seguir afrontándolos si no se dispone inmediatamente del anticipo previsto".
En este sentido, el directivo justificó que el depósito en la cuenta solicitada "le dará mayor seguridad al Estado para que se pueda terminar la obra, que es lo quiere tanto como la firma".
Efectivamente, en eso coincidió el secretario nacional de Obras Públicas. Aunque se plantó expectante respecto de efectivizar el giro financiero tal como lo pidió la concesionaria. Si bien desde Puentes consideraron que "no hay ningún impedimento legal para hacerlo a la UTE que brinda servicios a Puentes del Litoral desde 1998", el funcionario se atajó: "Se va a pagar siempre y cuando el servicio jurídico de Economía lo apruebe; hay que ver que la plata vaya directamente para la obra. Si va a un embargo, el Estado no abonará", dijo. Y luego agregó que "si lo autoriza Economía se aportará la asistencia financiera en la UTE, de otro modo no".
El secretario indicó también que "la plata no va a ir a ningún lugar que no sea la terminación de la obra". Más aún, sostuvo que en la reunión de hoy se va a exigir a la concesionaria que "no se pare la obra; el Estado le dio un préstamo y si ella no puede recibirlo y no garantiza terminarla, ya se verá la actitud del gobierno".
No obstante, Desimoni se mostró optimista, aunque disgustado por "la amenaza de la empresa de paralizar la construcción".
En tanto, desde el Congreso nacional, el diputado Héctor Cavallero repitió su pedido al gobierno nacional para que de manera "urgente y definitiva" la compañía finalice la conexión con Victoria "bajo pena de llevar adelante la ejecución de las garantías". Y el legislador socialista Rubén Giustiniani expresó su "rechazo a las declaraciones emitidas por el presidente de Puentes del Litoral, Marcello Venturini, quien manifestó la imposibilidad de la empresa de sostener financieramente el inicio de los trabajos".

Los trabajos se podrían mantener una semana más.