Los apresaron por extorsionar a dos empresarios

Son tres jóvenes que enviaron anónimos exigiendo $15 mil para no poner en riesgo a las familias de sus víctimas

Dos empresarios rosarinos, con escasa diferencia de horas, recibieron la mañana de ayer sendas notas extorsivas en sus domicilios. A los dos les exigieron la entrega de 15 mil pesos en una esquina de la zona oeste de la ciudad a cambio de que sus familias no corran peligro. La rápida denuncia de los hombres permitió montar un operativo policial en el cual se fingió el pago del dinero. Así, tres jóvenes fueron apresados y en su poder se hallaron pruebas comprometedoras.
Los hechos empezaron a desarrollarse la mañana de ayer. A las 5.30, José Ramón Adalio encontró debajo de la puerta de su casa, en Eva Perón al 5200, una hoja escrita en computadora en la cual le exigían la entrega del dinero si quería preservar la vida de sus familiares. Dos horas más tarde, idéntica situación vivió Enrique Grassia, cuando su esposa quiso sacar el auto de la vivienda que comparten en pasaje Windels al 400. Ambos hombres, según el mensaje extorsivo, debían dejar el dinero en de la misma forma y en el mismo lugar: en un bolso de mano introducido dentro de una caja de cartón y al pie del teléfono público que se erige en la esquina de Tucumán y Solís.
Así las cosas, y con las denuncias hechas, el jefe de la División Seguridad Personal de la policía rosarina, comisario Sergio Aguilar, montó un operativo para dar con los maleantes. En conocimiento de la jueza de Instrucción número 6, Raquel Cosgaya, un oficial simuló hacer entrega del dinero en el lugar indicado en horas de la tarde de ayer.
Transcurridos unos minutos, una mujer llegó hasta la garita telefónica en busca del envoltorio en el cual presuntamente estaba el dinero. Rápidamente fue apresada por los policías destacados en el lugar e identificada como Daniela Mabel Giménez, de 18 años. La joven, sorprendida, soltó el paquete y acusó a un hombre que la esperaba en las cercanías y también fue apresado. Se trata de Mauricio Oscar Serafín, también de 18 años. Junto a este muchacho también fue detenido Franco Damián Forte, de 20 años.
En poder de los apresados, los agentes hallaron otras copias de mensajes extorsivos, algunos de ellos escritos con la misma computadora y otros con birome. Según los investigadores, la inteligencia hecha por los jóvenes se extendía a la vida de sus víctimas. "Tenían un escrito en el que figura la cantidad de hijos que tienen, los autos de su propiedad y los horarios de trabajo", sostuvieron.