Tanto Leopoldo Moreau como Angel Rozas coincidieron ayer la capital provincial en que trabajan para "contener el voto radical" y aceptaron que la fórmula integrada por el legislador y Mario Losada "está por detrás" de lo que significa la UCR como institución. No obstante, ambos los dirigentes aseguraron que "la base radical vota por el partido" y que ella le otorga a sus candidatos "un piso histórico no menor al 15%".
Moreau, Losada y Rozas estuvieron ayer en Santa Fe, donde la dupla radical inició, con un acto en Luz y Fuerza, la campaña electoral que proseguirá hoy en Rosario, también en Luz y Fuerza (Paraguay al 1100), a las 20.
Si bien los dirigentes aceptaron las críticas que se le formulan a la UCR por el fracaso del gobierno de Fernando de la Rúa como por la complicada elección interna, sostuvieron que el radicalismo presenta, a diferencia del resto de las candidaturas presidenciales, una fórmula "elegida en términos de mayor democracia", vale decir que surgió del voto de afiliados e independientes.
"Desgraciadamente todo el sistema político está en crisis, y eso alcanza a la UCR, pero la crisis también alcanza al conjunto de los sectores sociales", afirmó Moreau. Luego se despachó con fuertes críticas al PJ porque presenta tres fórmulas y a los diez años de gobierno de Carlos Menem, cuya acción -sostuvo- ha dado como resultado el actual estado de situación.
Tanto Rozas como Moreau desestimaron la idea de que también la UCR presenta tres fórmulas, en alusión a las de Elisa Carrió y Ricardo López Murphy, e insistieron en que hay una sola: Moreau-Losada. Luego aceptaron que persisten algunos problemas internos, de ahí que Moreau insistiera en que se propone "contener el voto radical", mientras que ambos intentaron rebajar los decibeles de las recientes manifestaciones de Raúl Alfonsín, quien amenazó con expulsar a los afiliados que apoyen a Carrió o a López Murphy.
Pocos recursos
"El radicalismo lleva adelante su campaña cargando con la dificultad adicional de la enorme disparidad de recursos que se tienen, porque del gobierno de De la Rúa, como partido, no salimos enriquecidos del poder", manifestó Moreau. Sus dardos estuvieron dirigidos a los tres candidatos del PJ y a López Murphy (a quien fustigó en varias oportunidades), de quien dijo estar recibiendo los apoyos que oportunamente tuvo Domingo Cavallo.
Por su parte, Rozas manifestó que había reasumido la conducción del comité nacional partidario por entender que estaban superados los hechos que lo llevaron a dimitir. "Ahora estamos en un camino de franca recuperación, tratando de poner al partido en el máximo nivel competitivo a pesar de saber que es un momento de dificultades para el mundo político y en particular para la UCR". Luego expresó su confianza de que el radicalismo vaya al ballottage y que se transforme "en una verdadera opción para el electorado".
La Ciudad
