Convenios del Magic con las facultades de Agrarias, Veterinarias y Exactas

Patentes: la región se suma a la carrera

La provincia y la universidad impulsarán el desarrollo de tecnología de impacto económico local

Con la mente puesta en impulsar el desarrollo de tecnología local para insertarse en la economía del conocimiento, el Ministerio de la Producción de la provincia firmó esta semana convenios de trabajo con las facultades de Ciencias Agrarias, Veterinaria y Ciencias Exactas de la Universidad Nacional de Rosario.
De esta forma quedó conformado un grupo de trabajo que apunta a articular el esfuerzo de los investigadores y especialistas de las distintas casas de estudio con las demandas que recibe el Magic de parte de distintos segmentos productivos. Desde ese punto de vista, los convenios formalizan la cooperación en áreas como ganadería, nuevos productos agrícolas, sanidad animal, cunicultura, porcinicultura y apicultura.
"Se trata de coordinar acciones destinadas a asistir al sector productivo de Santa Fe y al mismo tiempo potenciar el desarrollo de tecnología local en un mundo donde el desarrollo económico se mide por la cantidad de patentes que se generan", señaló el ministro de Producción, Ricardo Fragueyro.
El convenio firmado con la Facultad de Ciencias Agrarias busca incrementar la ganadería ovina en la provincia, asesorando a los grupos de productores del programa Carnes Santafesinas, de modo de ofrecer una alternativa de diversificación. Para ello saldrá al ruedo Magrario (Cordero Magro de Agrarias), el ecotipo desarrollado por la casa de estudios local, que produce animales con alta tasa de crecimiento y menor depósito graso.
Hugo Alvarez, decano de la facultad, señaló que Magrario fue desarrollado y registrado por Ciencias Agrarias y que el convenio con el Magic posibilitará que se ofrezcan los reproductores a los productores de Carnes Santafesinas o a los productores que por la extensión de sus campos no pueden hacer ganadería bovina pero sí criar ovejas.
Fragueyro explicó que en poco más de 10 años, el stock ovino en Argentina pasó de 70 millones de cabezas a 15 millones. Ese retroceso también se sufrió en Santa Fe, que participa del 4% de stock nacional. Pero de la mano de la devaluación y de la ley nacional 25.422 de recuperación de la ganadería ovina, el sector vuelve a ser una alternativa productiva.
El convenio con la facultad de Veterinaria, que conduce Arsenio Alfieri, persigue el objetivo de desarrollar un programa de asistencia y colaboración recíproca para contribuir al desarrollo de programas de salud animal, en sus aspectos epidemiológicos y de control. Fragueyro explicó que Santa Fe es una de las primeras exportadores de carne de la Argentina, con un status sanitario que está por encima de la media del país, lo que obliga a extremar los controles para evitar crisis sanitarias que puedan afectar esa posición.
En el ámbito de producciones alternativas, la facultad asesorará a los productores que en el ámbito del Magic vienen trabajando en la producción de conejos, un rubro en expansión. Además, Veterinaria intensificará la transferencia de tecnología en el terreno de la porcinicultura, a partir del trabajo que desde hace años viene llevando adelante con el Instituto de Porcinotecnia. Los investigadores de la casa de estudio aislaron y descubrieron recientemente un virus porcino que afecta la producción, y en las próximas semanas comenzará a realizar seminarios y distintas actividades para realizar tareas de prevención.
David Asteggiano, decano de Ciencias Exactas, describió que el trabajo acordado con el Magic apunta en lo general al desarrollo de proyectos de investigación, aplicación y desarrollo. La primera demanda que deberán atender proviene de los productores nucleados en el Programa Apícola Provincial, en el marco de un proyecto para desarrollar una planta que fabrique tambores de miel y en la fabricación de un sistema de alerta electrónico contra el robo de colmenas. También en el ámbito de producciones intensivas, trabajarán en el desarrollo de la cadena de frío para helicicultura.
La facultad de Ciencias Exactas tiene en marcha una incubadora de empresas que fomenta el surgimiento de empresas a partir del trabajo de investigadores. Actualmente, una de las firmas se dedica a la fabricación de plantas de agua potable para poblaciones de menos de 30 mil habitantes y la otra surgió a partir del desarrollo de un sistema de resonancia magnética para ensayos de materiales y prospección petrolera.
"Creemos que desde el Estado debemos impulsar este cambio en el paradigma económico, frente a un mundo en el que la liberalidad de inversiones y el aseguramiento de patentes hacen la diferencia", señaló Fragueyro, convencido de que "ese desarrollo es posible en el país si nos concentramos en las investigaciones que pueden solucionar problemas productivos de la región".