Eliminaron planes de competitividad

El paro no frenó a Lavagna y avanza el paquete fiscal

Diputados aprobó el pago de ganancias por reintegros a las exportaciones. No habrá nuevas medidas

Mientras las entidades del sector agroalimentario decidieron archivar las protestas, el gobierno logró avanzar esta semana en el paquete fiscal que, fundamentalmente, apunta a obtener recursos del campo.
La Cámara de Diputados convirtió en ley dos nuevos proyectos del paquete impositivo impulsado por el gobierno para mejorar la recaudación: aprobó la eliminación de los beneficios tributarios creados por los planes de competitividad y la modificación que obliga a los exportadores a pagar el impuesto a las ganancias sobre los reintegros.
Las ventajas impositivas entregadas a través de los planes fueron creadas mediante cuatro decretos, promulgados entre mayo y junio de 2001, cuando Domingo Cavallo era ministro de Economía.
La mayoría beneficiaban a empresas del sector agropecuario, según un informe elaborado por la comisión de Finanzas de la Cámara de Diputados.
Los sectores que siguen en importancia, después del agro, son: producción de calzado (13%), textil e indumentaria (8%), automotriz y producción de bienes de capital (7%).
Según la Afip, los beneficios implicaban una pérdida de 447 millones para el fisco.
El gobierno pidió al Congreso su eliminación por considerar que la devaluación del peso favoreció la competitividad del sector productivo y, por lo tanto, las ventajas impositivas carecían de sentido.
Las modificaciones impositivas aprobadas en la Cámara de Diputados también obligan a los exportadores a pagar el impuesto a las ganancias por los reintegros impositivos que reciben.
La versión que finalmente fue aprobada incluyó las modificaciones del Senado, que en vez de establecer definitivamente el impuesto buscó como camino intermedio la suspensión de la exención hasta el 31 de diciembre próximo.
La oposición mayoritariamente se abstuvo en la Cámara de Diputados y facilitó así que se impusiera el texto del Senado.
Los reintegros permiten la restitución, total o parcial, de impuestos pagados por la mercadería que se exporta.
Desde el 13 de febrero de 2002, el Poder Ejecutivo redujo en un 50% todos los reintegros y quedaron con una alícuota mínima para los productos de 1,35 por ciento y una máxima de 6 por ciento.
En rechazo a la ofensiva tributaria del gobierno, la mayoría de las entidades que participan de la cadena agroalimentaria protagonizaron la semana pasada un inédito paro comercial, que consistió en no realizar operaciones de compra.venta de granos.
Esta semana, las organizaciones se volvieron a reunir y, luego de arduas discusiones, decidieron no realizar nuevas protestas. Ahora apuestan a fijar una agenda para los candidatos que compitan en las elecciones presidenciales de abril.
Si bien el malestar continúa, debido a que los representantes del sector no recibieron ninguna respuesta oficial, los impulsores de una nueva medida no encontraron consenso en el sector.
Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), que se ubicó en sintonía con la Rural durante la semana pasada y prácticamente fue la entidad que motorizó la adhesión de todos los integrantes de la cadena agrícola comercial, quedó literalmente aislada como para definir nuevas acciones gremiales, ya que el presidente de la SRA, Luciano Miguens, anticipó que no es partidario de continuar con protestas.
"No es el momento indicado para seguir con esa metodología de reclamos", afirmó esta semana el dirigente ruralista. Entre tanto, los empresarios del circuito cerealero exportador entendieron que "se buscará" otro modo de insistir ante el gobierno.