Telecom podrá ser sancionada si no reimprime la nueva guía

Telecom Argentina podrá ser sancionada si no vuelve a imprimir y a reenviar a sus clientes de Rosario, y del resto de la provincia, la guía telefónica 2002/2003, a partir de pasado mañana. Así lo dispuso la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) aunque el gerente local de Relaciones Institucionales de la compañía, Ricardo Scaglione, dijo que la resolución de la CNC fue apelada por la empresa.
Desde el ente de control aseguraron que la compañía telefónica fue emplazada en diciembre a reeditar las guías de toda la provincia de Santa Fe, a través de la resolución 1.377. Allí se comunicó a la empresa que contaba con 60 días, desde el momento de recibida la notificación, para editar un nuevo texto.
Claro que la reedición debía tener en cuenta dos objeciones que se tuvieron sobre la polémica guía: el tamaño y tipo de letra debería ser al menos igual a la de la edición 2001/2002, que sí era legible; y no podría incluir comillas en el listado de apellidos de los usuarios.
"Si la empresa no cumple, contará con una sanción. Tal vez una multa", adelantó un funcionario de la CNC.
Frente a esta posibilidad, el funcionario de la empresa telefónica local no se inmutó. "La medida fue apelada. Habrá que aguardar el resultado", indicó Scaglione.Lo cierto es que la posibilidad de que los usuarios de Telecom puedan leer sin problemas la última guía está aún verde a pesar de que su presentación en sociedad contó en noviembre pasado con un álgido repudio. Es que de 613 páginas, se comprimió en 352 páginas. "Fue un intento de bajar los costos ", habían dicho desde Telecom local.
Cientos de quejas anclaron en la CNC, la Oficina Municipal de Defensa del Consumidor y la Defensoría del Pueblo. Es más, muchos vecinos se negaron a recibir las guías y el Foro del Consumidor, haciéndose eco de las quejas, propuso donar los ejemplares a las escuelas públicas de la ciudad para que luego se vendan como papel reciclado.
Estudios oftalmológicos también apoyaron las denuncias. En su momento, La Capital consultó al titular de la cátedra de Oftalmología de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Alejo Vercesi, quien aseguró que "la letra de los directorios, al ser más chica que la tipografía más pequeña utilizada en los test oculares, puede ocasionar trastornos en la visión".