La candidata a presidente por el ARI, Elisa Carrió, afirmó ayer que la primera dama, Hilda Chiche de Duhalde forma parte de un "régimen nepotista", aunque no ocupa ningún cargo y "prefiere no firmar ningún decreto para no ir presa". De este modo, Carrió le respondió a la esposa del presidente, quien sostuvo que la postulante del ARI "no está capacitada para conducir al país" y que, "si llegara al poder, sería uno de los tantos ídolos de barro" que ha fabricado la política Argentina. Carrió procuró inicialmente no responderle a Chiche pero, lentamente, fue cobrando temperatura y terminó por descalificar duramente a la mujer del jefe del Estado. "Yo no le voy a contestar a la señora. La verdad, yo no puedo pelearme con otra mujer. Yo sé de los esfuerzos que ella ha hecho. Creo que es una buena mujer. La he protegido mucho en el Parlamento cuando la atacaban. Sé de sus profundas limitaciones", comenzó diciendo Carrió. Sin embargo, al ser consultada sobre si la primera dama está políticamente equivocada, la jefa del ARI comenzó a liberar sus expresiones. "Ella no está equivocada dentro de sus limitaciones. Lo único que no quiere es firmar ningún decreto para no ir presa. Entonces no tiene cargos y forma parte de un régimen nepotista. Yo siempre digo, gracias a Dios, Duhalde no tiene más esposas porque sino tendríamos muchísimas candidatas", chicaneó. Sin ser repreguntada, Carrió prosiguió: "No le puedo contestar porque sería un agravio para ella. No tengo por qué agraviarla porque en realidad... No puedo hacerlo. No me sale del corazón porque sé que, con sus limitaciones, ella hace esfuerzos". "Prefiero bancarme el agravio de esta mujer que, dentro de todo, es una mujer que hace algunas cosas, a tener que agredirla con alguna verdad. La verdad sin caridad no tiene sentido, yo por la caridad no digo la verdad", enfatizó. Consideró, sin embargo, que "de todas maneras ella tendría que hacer un examen de autoconciencia porque en términos de formación y competencia tendría que tener algo de respeto para no enfrentarse con el otro". "La cuestión de género a mí me mata, a menos que sea una corrupta. La verdad es que no quiero atacar", concluyó.
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