"Más seguridad, menos impunidad" fue el grito constante que se escuchó en la ruidosa movilización que protagonizaron un grupo de vecinos de la zona de Fisherton. La gente caminó por la avenida Eva Perón (ex Córdoba) y pidió a los gritos respuestas por la ola de robos y asaltos que asolan a la ciudad. Lejos quedó el pretendido "vecinazo" al que convocaron los organizadores, sin embargo hubo dirigentes barriales de distintos sectores y mujeres que se llegaron en bicicleta o con los chicos a cuesta. Unas cien personas marcharon ayer a la tarde desde la rotonda de Wilde hasta la esquina de Donado, a media cuadra de la seccional 17ª. Había representantes de las diferentes vecinales de Fisherton (Sur, Norte, R y Antártida Argentina), y también del country de Funes, Hostal del Sol (Este y Oeste) y Empalme Graneros. Fue otra propuesta de vecinos, impulsada por dirigentes barriales, similar a la de Empalme de la semana pasada, aunque con menos cantidad de participantes. Es que la gente de Fisherton "no está acostumbrada a salir a la calle a protestar", reconocieron. Pero parece que les está llegando la hora porque "con guardias privados, alarmas, perros o rejas no alcanza para prevenirse de los robos", comentó el vecinalista Domingo Ricardi. Los manifestantes hicieron mucho ruido con bombos, platillos y hasta cacerolas muy gastadas de tanto golpearlas. También llevaron carteles improvisados y banderas argentinas. Los relatos de hechos delictivos se sucedieron en el medio de la movilización que despertó la curiosidad de los que transitaban por la zona y la adhesión de algunos comerciantes que atendieron con las rejas cerradas, algo ya habitual debido a la inseguridad. "El otro día me salvé de un robo porque mi perro atacó al ladrón. No puede ser. Los vecinos son los que viven como presos, en lugar de los delincuentes", señaló Mirta Riera, quien se acercó desde Donado y Colombres en su bicicleta. Graciela fue a la marcha con sus hijos y contó a La Capital que en su barrio, el de los gráficos, "los arrebatos son permanentes" y le pidió a la policía "que salga a caminar las calles si es que no tienen móviles o nafta para los autos". Ricardo Reynoso (PPS) fue otra vez el único concejal que se acercó, el resto prefirió seguir sesionando. Como presidente de la reflotada comisión de Seguridad del Concejo Municipal dijo que "la idea es acompañar estos reclamos para que no queden como tales y articular posibles soluciones entre la Municipalidad y el Ministerio de Gobierno". A la vez, ayer se hicieron más asambleas barriales por la inseguridad: en Paraguay al 2500 (ver aparte) y en Riobamba al 7000. La idea de los dirigentes de Fisherton es convocar a una protesta en la plaza San Martín, cuando venga el gobernador Carlos Reutemann.
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