Las entidades del agro definen una fórmula de protesta

La estrategia del campo apunta a paralizar la comercialización

Divergencias en la cadena agrícola, y hacia el interior de las agrupaciones, demoraron una medida conjunta

Marcos Cicchirillo / La Capital

Las entidades agropecuarias siguen sin ponerse de acuerdo sobre una posible medida de fuerza conjunta debido a la diversidad de intereses que existe dentro de la cadena agroindustrial. Los referentes del sector señalaron que la protesta que junta más voluntades es un parate por tiempo determinado de la comercialización, después de que quedara descartado un paro tranqueras afuera.
Ante la falta de acuerdo de la cadena agroindustrial para lanzar una protesta colectiva, además de las propias divergencias hacia el interior de las organizaciones, las entidades denunciaron que el campo es objeto de un "abuso fiscal" de parte del gobierno nacional, a través de una solicitada publicada el jueves pasado en los principales matutinos de todo el país.
De esta forma, las agrupaciones buscaron mantener el frente de guerra contra un gobierno nacional que la semana pasada los había parado en seco ante la batería de reclamos impositivos, con el recordatorio de el campo junto con las petroleras fueron los ganadores del nuevo escenario económico.
La semana próxima se verán los pingos, ya que las cuatro entidades representativas del sector productivo definirán el modelo de protesta. A lo largo de la semana pasada, cada una de las agrupaciones (Sociedad Rural, Coninagro, Confederaciones Rurales y Federación Agraria) realizaron consultas a sus bases para definir sus posturas.
Aunque con fuertes divisiones internas, algunas de las cuales se hicieron públicas, la medida que congregaría más voluntades es la de frenar la comercialización por un período determinado.
Eduardo Buzzi, presidente de Federación Agraria (FAA), señaló que existe consenso para "participar de protestas que representen los reclamos de los productores, pero no siendo utilizados por nadie", en clara alusión al sector exportador, al cual también le pasan factura por las retenciones del 10% que les realizan a los productores. Desde Confederaciones Rurales (CRA) se coincidió en que la protesta debe ser liderada por los productores pero no tranqueras afuera.
Por lo pronto, los referentes de la cadena agroindustrial durante la última semana boicotearon al gobierno nacional con el faltazo sistemático a todos los actos y eventos a los cuales ya habían confirmado su participación. Al tiempo que varios de ellos se dedicaron a presionar sobre los legisladores para torcer el destino del paquete fiscal, que por el momento continúa empantanado.
Las entidades advirtieron que "la carga impositiva actual sobre el sector terminará ahogándolo" y, específicamente, mencionaron al "inequitativo y arbitrario tratamiento del impuesto a las ganancias sin ajuste de existencias, lo que desconoce la realidad y transforma el tributo en un impuesto al capital".
También se quejaron de "la falta de implementación de un IVA exportación neutro en cuanto a alícuotas y fechas de devolución, que ha creado un régimen perverso en la formación de precios, debido a los atrasos constantes en su devolución en los que ha incurrido el Estado".

"No seremos utilizados por nadie", dijo Eduardo Buzzi.