El Congreso avanzará hoy con la sanción del paquete impositivo que reclama el gobierno como un instrumento necesario para lograr el superávit fiscal exigido por el FMI, pero sólo en parte. Si bien en el Senado acordaron convocar a sesión para hoy a la mañana a fin de aprobar dos iniciativas: la que elimina los planes de competitividad y la que restituye el impuesto a las ganancias a los reembolsos por exportaciones, el panorama es más complicado en Diputados, donde aún no está definido si habrá sesión hoy o mañana, o si directamente quedará frustrada la convocatoria. En la Cámara baja existe consenso para transformar el impuesto a las transferencias de los combustibles (ITC) en un porcentaje variable, pero quedó prácticamente descartada la rebaja al impuesto a las ganancias propuesta por el Poder Ejecutivo. El acuerdo para acercar posiciones en el Congreso obligó al gobierno a aceptar que los legisladores rechacen el veto al artículo 68 del presupuesto, en el que se instrumentaba un plan de obras públicas por 260 millones de pesos. Esta iniciativa, que debe ser aprobada por dos tercios de ambas cámaras legislativas, será incluida en el temario de Diputados si finalmente se pacta tratar los proyectos impositivos. En el Senado, tanto en el justicialismo como en el radicalismo, hay consenso para modificar la derogación de los planes de competitividad, por lo que esta iniciativa deberá regresar a la Cámara baja. Los senadores establecerán la caducidad de todos los planes para el 31 de marzo, con excepción de tres sectores: los bienes culturales, el transporte y el agro (este último en realidad será beneficiado con medidas impositivas generales y no sectoriales). En esas tres áreas se facultará al Ejecutivo a determinar la continuidad de los beneficios impositivos más allá de ese plazo. En tanto, el proyecto que restablece ganancias para los reintegros por exportación se aprobará sin cambios y se transformará en ley, pero con un compromiso general de todos los legisladores de sancionar una ley complementaria para limitar su vigencia a un año. Por tratarse de materia impositiva, esta ley complementaria deberá ser iniciada por la Cámara de Diputados para después pasar al Senado. Pero, precisamente la situación en Diputados emerge poco clara. La UCR anunció que está dispuesta a participar de la sesión y votar a favor del proyecto del ITC. Sin embargo, las diferencias persisten en el propio oficialismo, donde dudan sobre la posibilidad de reunir los votos necesarios para su aprobación. Por ello, el presidente de la Cámara baja, Eduardo Camaño, convocó para hoy a la tropa justicialista, con la intención de calcular con certeza la cantidad de legisladores con los que puede contar en la sesión. El cambio en el ITC no impactará, por ahora, en el precio de los combustibles, ya que el proyecto simplemente traduce en un porcentaje el monto actual del impuesto. Sin embargo, las consecuencias podrían notarse en los futuros aumentos de las naftas, ya que el impuesto comenzaría a multiplicarse en forma proporcional. El proyecto para reducir el impuesto a las ganancias del 35 al 30 por ciento es resistido desde los distintos sectores políticos porque es considerado una mera compensación para no introducir un esquema de indexación por inflación que reclaman los empresarios. El ministro Roberto Lavagna aclaró a los legisladores que está en total desacuerdo con la indexación por inflación. "Es esto (por el proyecto de ganancias) o nada", les aclaró en las reuniones que mantuvo con ellos hace dos semanas.
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