La diputada Elsa Lofrano presentó un proyecto para modificar el Código Penal e incluir la castración quirúrgica o química, como pena para castigar a los violadores. "La pena contempla acabadamente la imposibilidad de reincidencia", sostuvo la legisladora peronista por Chubut y sostuvo que "favorece la reconversión del delincuente y coloca a la sociedad a buen resguardo de la comisión de este delito", en la en la iniciativa que promueve la modificación de los artículos 119, 120 y 124 del Código Penal para incluir el castigo a los autores de estos delitos contra menores.
En el último mes se conocieron numerosos casos de abusos contra menores, como los atribuidos a Simón Hoyos y al concejal Guillermo Capellán, además de la investigación de Eduardo Schlageter -multimillonario venezolano de 70 años- acusado en Bariloche, por supuesto "abuso sexual con acceso carnal".
En tanto, el jefe de policía de Formosa, Felipe Sergio Cañete, reveló ayer que "en enero último se incrementó en un 25 por ciento las denuncias en comisarías sobre abusos sexuales a menores respecto del mismo mes del año anterior".
La propuesta para castrar a los violadores generó la reacción de miembros de la Iglesia Católica, como el sacerdote experto en bioética de la Universidad Católica de Córdoba, Raimundo Alesio, quien dijo que "la Iglesia no acepta la castración tanto como método terapéutico o anticonceptivo para castigar un delito".
Hoyos declaró ante el juez
El juez de instrucción formal Luis Agüero Molina indagó nuevamente ayer al empresario y abogado Simón Hoyos, detenido hace 15 días en un hotel alojamiento con una niña de ocho años, a raíz de la denuncia que por presunto abuso sexual planteó una hermana adolescente de la menor y, en esta ocasión, el acusado fue asistido por su nuevo abogado Pablo Tobío.
Hoyos pasó casi dos horas en el juzgado y, según lo por su defensor, "se declaró inocente" de los cargos que se le achacan aunque "por supuesto admitió que conocía a la denunciante".
La joven de 18 años que el miércoles último se presentó ante el juez para denunciar que en 1999 el empresario ya había abusado de ella, es hermana de la pequeña encontrada en el hotel alojamiento Palmeras junto a Hoyos el pasado 7 de febrero y ambas son hijas de la empleada doméstica del acusado.
Tobío evitó responder cuando se le preguntó si mantendría la versión del hidromasaje que presentó su antecesor Marcelo Arancibia para explicar el desvío de Hoyos hacia el hotel y reiteró que "de la causa no pudo decir mucho más porque recién lo asistí en esta primera indagatoria".
El abogado indicó además que su cliente "está enfermo" de una afección en el oído y dijo que se encuentra "muy afligido" por la implicancia social que tuvo el caso.
En tanto, allegados a la investigación indicaron que el empresario también fue sometido a una pericia médica, en una dependencia judicial de Pellegrini al 900, por lo que estimaron que sería una de los pasos previos a su eventual traslado al penal de villa Las Rosas. (DyN)