Una testigo de identidad de reservada comprometió ayer aún más al prófugo Horacio Conzi, al sostener que vio al empresario ordenar que "sacaran ya" a Marcos Schenone y a sus amigos del restaurante, cuando vio a la chica que le interesaba besándose con el joven , luego asesinado. La mujer también escuchó, momentos después, cuando los custodios del local se hablaban por handy para preparar la camioneta porque "se va Horacio".
Así lo reveló frente a los fiscales Hernán Collantes y Mario Kohan una ex empleada de Dallas que, además, ratificó los detalles que habían prestado otros dos testigos días atrás en forma reservada.
Según indicaron fuentes judiciales, la nueva testigo aseguró que en la madrugada del 16 de enero último estaba en el primer piso de Dallas, el megacomplejo que los hermanos Conzi tienen en Martínez, y allí vio a Horacio ordenarle a un empleado a los gritos "sacalos ya; sacalos ya".
Los gritos fueron tan fuertes que los escuchó pese a que estaba a varios metros de distancia y al ruido y a la música que había en el local, comentaron las fuentes.
El testimonio coincide con los otros que ya constan en el expediente, de donde se desprende que Conzi se molestó porque una chica que le interesaba y su amiga estaban disfrutando una reunión con Schenone y otro joven. Al parecer, la gota que habría colmado la paciencia de Conzi habría sido ver a la joven besándose con la víctima.
A raíz de ello, Conzi habría ordenado sacar a los jóvenes del local pero las chicas decidieron acompañarlos. Es así como abordaron todos juntos un remise que, momentos después, fue perseguido durante varias cuadras por la camioneta Jeep Cherokee que pertenece a Horacio Conzi.
Precisamente, la nueva testigo le confió ayer a los investigadores que, momentos después de haber escuchado los gritos de Conzi, se dirigió a la cocina de Dallas. Y allí también advirtió cuando por handy los custodios se enviaban mensajes para "prepara la camioneta de Horacio que se va", añadió la mujer en su declaración, dijeron las fuentes.
Amplias sospechas
El aporte de la testigo no hace más que reforzar las sospechas que ya se tienen contra el empresario prófugo desde el 16 de enero cuando ocurrió la tragedia en la que Schenone recibió tres tiros de los 14 que se dispararon sobre el remise en el que viajaba.
Conzi está seriamente comprometido en el caso: no sólo lo acusaron los sobrevivientes sino que también lo comprometen las pericias balísticas y los análisis hechos sobre la camioneta y el remise.
Precisamente, los análisis de las últimas pericias hechas sobre los vehículos confirman las manchas de pintura entre ambos vehículos (producto del roce) y establecen que la camioneta de Conzi fue reparada luego del incidente, tal cual como lo señalaban los informes preliminares, señalaron las fuentes consultadas.
Además, las cámaras de seguridad de Kansas, la principal competidora de Dallas, registraron un fragmento de la persecución entre el remise y la camioneta. (DyN)