Un grupo de legisladores y dirigentes del Frente Grande (FG) formalizaron ayer su apoyo al candidato presidencial justicialista Néstor Kirchner para las elecciones del 27 de abril, y anunciaron que conformarán "una fuerza política autónoma" de lo que denominaron "las vertientes tradicionales".
Entre los frentistas que respaldan a Kirchner está el titular del bloque de diputados de esa agrupación, Darío Alessandro, la diputada Nilda Garré, la senadora Diana Conti y el economista Arnaldo Bocco, sobre una lista de una docena de legisladores y dirigentes nacionales y provinciales.
Asimismo, Juan Pablo Cafiero, uno de los socios fundadores del FG junto a Carlos Chacho Alvarez y actual ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, oficializó su respaldo al santacruceño.
En conferencia de prensa junto a Kirchner, tras una reunión mantenida ayer en la Casa de Santa Cruz de la Capital Federal, los legisladores aclararon que no se plantearon una renuncia formal al Frente Grande, aunque confirmaron que buscan "conformar una fuerza política autónoma de las vertientes políticas tradicionales".
En ese marco y tras hacer una autocrítica por su paso por el gobierno de la Alianza UCR-Frepaso, Alessandro manifestó que apoyarán en los comicios del 27 de abril al gobernador patagónico, en el marco "de un acuerdo amplio para la reconstrucción nacional basado en principios programáticos y de justicia social".
Kirchner recibió satisfecho el apoyo de los dirigentes frentistas al señalar que servirán a su proyecto de convocatoria multisectorial para "construir un espacio plural" y le aportarán "ideas y experiencia para consolidar fuerte la gobernabilidad".
El santacruceño admitió que si bien "en el justicialismo puede haber una fractura de lo que es la estructura partidaria", en su caso aspira a "un justicialismo integrado al resto de las fuerzas sociales que quieren generar una alternativa de gobernabilidad en la Argentina".
Alessandro, Conti y Garré explicaron, a su turno, las bases de su decisión de apoyar la candidatura de un justicialista, aunque cuidándose expresamente de no confirmar una ruptura con su partido, el Frente Grande, presidido actualmente por el jefe de Gobierno porteño y posible candidato a la reelección, Aníbal Ibarra.
Tras hacer una autocrítica sobre su paso por el gobierno de la Alianza, Alessandro dijo que "fuimos parte de una alianza que gobernó mal, pero que tenía un Poder Ejecutivo y muchas veces no tomábamos decisiones propias".
No obstante, el legislador señaló que "no nos escondemos, asumimos la responsabilidad, pero eso no nos invalida a seguir proponiendo una realidad más justa para la Argentina".
El legislador aprovechó la oportunidad para apuntar contra el ex presidente Carlos Menem, al señalar que "también hay muchos que tienen tremenda responsabilidad, altísimos grados de corrupción y siguen opinando como si la Argentina dependiera de ellos".
El diputado frentista evitó responder a una pregunta sobre si este nuevo desprendimiento del Frente Grande significa un certificado de defunción del partido fundado por Chacho Alvarez, aunque confirmó, junto con Nilda Garré, que el grupo de legisladores y dirigentes que integran "está trabajando conformando una nueva fuerza política autónoma".
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La Ciudad
