Firmat. - Finaliza hoy en España la primera Escuela Internacional de Ecoclubes que se realiza en Europa. Allí, desde el jueves último, jóvenes de Alemania, Rumania, Grecia y Polonia, además de 12 municipios del país anfitrión, debutaron en la estrategia ambiental que nació en el sur santafesino. Los europeos reaccionaron con entusiasmo ante la propuesta de unir la participación y la toma de conciencia para modificar las conductas que atentan contra la sustentabilidad en cada localidad, tal como impulsan los ecoclubes.
Como si fuera poco, el método de cuño argentino que logró hacer pie en Europa, tiene un valor agregado: forma líderes juveniles comprometidos con su entorno y con su comunidad. El elenco de los participantes a la Escuela Internacional de Ecoclubes de España se completa con los representantes de los 15 países de Latinoamérica donde estas organizaciones ya están consolidadas.
La experiencia española culmina hoy en la ciudad de Viladecans, a unos 30 kilómetros de Barcelona. Se trata de una ciudad de unos 50.000 habitantes que se movilizó ante la singular movida ambientalista. La actual es la quinta edición de los encuentros internacionales, la primera se realizó en Firmat y el año pasado, en Cuzco (Perú), se tomó la decisión de hacer pie en el viejo continente donde parecía que ya nada nuevo podía plantearse en torno al tema. Para el próximo año piensan llevar el proyecto al continente africano.
"Creemos que la diversidad enriquece y fortalece porque incorpora experiencias que permiten, vivir la no discriminación, la solidaridad y la socialización de las experiencias", fundamentó el creador de los ecoclubes y actual consejero consultivo de la red internacional de los mismos, Ricardo Bertolino. En distintos países, hoy el movimiento congrega 320 grupos de los que participan unos seis mil jóvenes, cuya coordinación a nivel mundial está a cargo del firmatense Salvador Dulcich.
En Viladecans, un municipio que en los últimos años tuvo un desarrollo importante, los jóvenes tendrán la oportunidad de profundizar temas como participación ciudadana, manejo de medios de comunicación, voluntariado y liderazgo. Además, interactuarán con la comunidad del lugar a través de relevamientos y talleres. Ayer los jóvenes participaron de una movilización que la gente del lugar realizó en contra de la potencial declaración de guerra de Estados Unidos a Irak.
La primera escuela internacional realizada en Europa llega precedida de un intenso trabajo realizado por los argentinos Sebastián Dalmazzo, Noelia Forgioni, Juan Pablo Escobedo y Martín Alesandretti, en España, República Dominicana, Estados Unidos y Uruguay, respectivamente. En cada uno de los países europeos incorporados a la estrategia de los ecoclubes, se trabajó con las organizaciones locales, con charlas en escuelas, municipios y medios de comunicación.
Para Bertolino, los jóvenes suelen parecer apáticos cuando sienten que los adultos no confían en sus capacidades de generar y sostener proyectos. "Qué les podemos pedir si los subestimamos y destruimos su autoestima", conjeturó, y acotó que muchos de quienes generaron cambios en la historia de la humanidad lo hicieron en sus épocas juveniles.
Respaldo de la OPS
Días atrás, representantes de los ecoclubes se reunieron en Washington con la médica argentina Mirta Roses, directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), que tiene una larga trayectoria dentro de esta institución. "Recibió con gran entusiasmo las propuestas que llevamos para los próximos años, y acordamos articular algunos puntos como la lucha contra el dengue", relató Bertolino.
Además, dijo que la formación de jóvenes dirigentes que promueven los ecoclubes, podría ser mejor aprovechada por los gobiernos locales y regionales. "Creo que la doctora Roses no sólo escuchó nuestras ideas, sino que se sintió motivada por las mismas y piensa brindarnos su apoyo", comentó.