Arijón al 1300

Una farmacéutica puso en fuga a dos ladronas

Entraron a robarle, las enfrentó y las corrió varias cuadras con vecinos. Las entregaron a la policía

Nora Bonel está cansada de los asaltos en su farmacia de Arijón al 1300. Por eso cerca del mediodía de anteayer no vaciló al detectar a dos jóvenes mecheras cargando mercadería en sus mochilas. Apenas las descubrió, las chicas tiraron las remeras y relojes que habían guardado en los bolsos y emprendieron el escape. La farmacéutica las corrió una cuadra y media y las atrapó. Después llegó la policía y detuvo a las ladronas.
Nora tiene 47 años y dos hijos de 18 y 21 años. Su gesto de audacia del martes no fue el primero. Algunos años atrás ya había recuperado una cartera que le habían robado dos maleantes en la calle.
El martes, cuando faltaba media hora para el mediodía, dos chicas de aspecto humilde llegaron a su farmacia de Arijón al 1300. Una de las supuestas clientas preguntaba en forma incoherente el precio de algunos medicamentos. Su compinche husmeaba las estanterías y los exhibidores eligiendo las remeras que planeaba robar mientras Nora no le sacaba la vista de encima. La mujer estaba detrás del cerramiento que instaló para protegerse de los atracos y decidió ponerle punto final al arrebato. Las dos chicas habían llenado las mochilas cuando el reclamo imperativo de la farmacéutica las sorprendió. "Mostrame los bolsos", ordenó la mujer. Las muchachas, entonces, arrojaron las remeras y los relojes casi destruidos al suelo y huyeron.
Nora corrió tras las ladronas, pero en el apuro por alcanzarlas se llevó por delante una estantería de vidrio. El accidente le provocó cortes en la mano y en la axila. Sin darse cuenta de que estaba herida siguió tras ellas, pero antes tuvo tiempo de avisarle a la hermana, que también atiende la farmacia, para que llamara a la policía.
Las dos chicas corrían por Arijón. Detrás iban Nora y su cuñado. Un automovilista, que oyó a la farmacéutica, frenó la marcha de las dos chicas, que se vieron acorraladas en Corrientes al 5200, donde terminaron rodeadas por Bonel y varios vecinos. Una mujer policía que pasaba por el lugar dio aviso a la central de operaciones del Comando Radioeléctrico y al rato una patrulla de esa fuerza de calle detuvo a las dos jóvenes.
Antes de ser arrestadas, la farmacéutica escuchó una amenaza de una de las ladronas. "Ahora te voy a denunciar porque me pegaste y soy menor", dijo la adolescente de 14 años que acababa de asaltarla.
Nora sostuvo que la decisión de perseguir a las dos jóvenes no respondió a una conducta racional. "Fue una reacción sanguínea, impulsiva", explicó. "No tolero la injusticia de que sigan pasando estas cosas. Estoy cansada de los robos".
Enseguida recordó los cinco robos, cuatro de ellos a mano armada, que soportó desde que abrió el negocio doce años atrás. El último había ocurrido el 21 de setiembre pasado cuando dos hombres saltaron la estantería y luego de inmovilizar a Nora se llevaron dinero.
La menor y su cómplice, identificada como Marisa D., de 20 años, fueron conducidas a la subcomisaría 20ª.

"Estoy harta de robos", dijo con fastidio Nora Bonel. (Foto: Silvina Salinas)