Año CXXXVI
 Nº 49.751
Rosario,
miércoles  12 de
febrero de 2003
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Una declaración llena de suspicacias
El abogado salteño negó haber abusado de la nena
Dijo que fue al motel para bañarse porque le dolía la cabeza. Su abogado avaló la coartada y después renunció

Salta.- El abogado y empresario Simón Agustín Hoyos, acusado de abusar sexualmente de una niña de 8 años en un motel de esta ciudad, negó los cargos ante la Justicia y dijo que se sentía "perjudicado" porque sólo había ido al alojamiento "a bañarse al sentir un fuerte dolor de cabeza".
En su versión de los hechos ante el juez Luis Agüero Molina, Hoyos dijo: "El viernes (último) a la mañana encontré a mi empleada -la madre de la chiquita- en el centro de la ciudad junto con la niña y me ofrecí a llevarla hasta su casa. Cuando iba en mi camioneta Ford F100 por la zona de la terminal de ómnibus, decidí darme un baño y me dirigí hacia el camino a la Isla e ingresé al hotel Las Palmeras a las 10.50. Dejé a la pequeña en el interior de la camioneta e ingresé a la habitación 23", agregó. Luego dijo que escuchó que la niña lloraba y la hizo ingresar a la habitación y en esas circunstancias irrumpieron la mucama, los custodios y la policía.
Hoyos aseguró que todo es "una equivocación" y que se siente "muy perjudicado", porque a la niña no le hizo "nada".
El juez Agüero Molina le hizo notar las contradicciones entre sus dichos y los de los empleados del hotel, quienes declararon que la pequeña "estaba en la cama, semidesnuda y con su pelo mojado", pero Hoyos no dijo nada en su descargo.
Al respecto, el defensor de Hoyos, Marcelo Arancibia, justificó que su cliente "dejó a la nena en el garaje y luego, ante el llanto, la hizo pasar a la suite y le lavó la carita para calmarla. Por eso la niña presentaba su pelo mojado cuando fue encontrada". Horas después de avalar esa coartada, el profesional renunció a la defensa.
Entre los testigos que declararon el lunes se encontraba la madre de la pequeña y en lo único que coincidió con Hoyos fue que se encontraron el día de los hechos y que el hombre se ofreció a llevar a su hija hasta su vivienda dado que ella tenía que efectuar otras diligencias.
En cuanto a la nena, los médicos aún no la han examinado ya que sigue bajo los efectos de un shock psicológico. "Por momentos dice algunas cosas, pero después se queda callada y no quiere tener contacto con nadie" explicaron los peritos.
El abogado de Hoyos reflexionó sobre la situación de su defendido: "Hoyos padece de un problema en su oído derecho que le produce intensos dolores de cabeza y eso es lo que le ocurrió mientras trasladaba a la nena. Si bien es reprochable que haya elegido un motel, no olvidemos que estaba con fuertes dolores de cabeza y debía manejar". Por otra parte, Arancibia insistió en que "no hubo violación, ni abuso, ni siquiera manoseo y eso es lo que le dijo al juez de la causa". (Télam)



El motel elegido por Simon Hoyos para darse un baño.
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