Carla Rizzotto / La Capital
Los útiles de la canasta escolar aumentaron en un año hasta un 125 por ciento. El mayor incremento se nota en los cuadernos, uno de los productos más usados durante el ciclo lectivo: los de tapa flexible de 48 hojas costaban 40 centavos en febrero de 2002, y ahora se consiguen en los negocios a no menos de 90. A sólo cuatro semanas para que comiencen las clases, en las librerías la situación es la siguiente: los clientes se quejan y los comerciantes tratan de justificar la suba. "No aumentaron tanto. O por lo menos el impacto no fue tan drástico porque los precios se fueron incrementando durante el año", aseguraron. Mientras tanto, asociaciones de defensa del consumidor afirman que están haciendo gestiones para que el mercado local ofrezca una canasta escolar económica (ver aparte).
A 27 días del inicio del ciclo lectivo, muchos padres ya están en busca de los útiles escolares. Y tras las recorridas de rigor en busca de precios la sorpresa es el común denominador. "Esperaba un aumento, pero no tan marcado. Cada pavadita te suma un poco más y cuando llegás a la caja te querés matar", se quejó María de los Angeles, una de las adelantadas en las compras.
Las quejas de la mujer están justificadas. Salvo algunos productos puntuales como la goma de borrar lápiz -que por su bajo costo tiene una influencia mínima en el precio de la canasta-, el resto de los útiles básicos aumentó. "Los precios son relativos, algunos subieron y otros bajaron. Pero la marcación de los valores tiene relación directa con el dólar", justificó Haydeé, encargada de una librería ubicada en Córdoba al 900.
Lo que aclaró la empleada del comercio fue que "en general el cliente no elige los productos más baratos; compra de buena calidad porque sabe que le tiene que durar todo el año". Claro que están los útiles como los cuadernos o repuestos de hojas que necesitan una reposición constante, y esos justamente se incrementaron un 125 y un 33 por ciento, respectivamente.
César Gasparinetti, dueño de una librería ubicada en Corrientes al 800, dijo que "la gente está buscando precios" y subrayó que "no encuentra tanta diferencia con el año pasado. Si se comparan los precios de hoy con los de diciembre de 2001 claro que se nota muchísimo el incremento. Pero desde esa fecha los precios fueron subiendo, lo que provocó que el impacto no fuera tan drástico", aseguró.
Los productos que registraron más aumento fueron los importados, con una suba hasta del 200 por ciento. Según el comerciante, los nacionales no sufrieron un incremento tan marcado. El comerciante dio un ejemplo: "La caja familiar de repuestos Rivadavia costaba 10,90 pesos y ahora vale 13,90".
Para el dueño de la librería, el aumento del 20 ó 30 por ciento "no es tan significativo", pero para los consumidores sí. "O los maestros están locos o viven en un termo, piden lo que nadie puede comprar. La lista de materiales de mi hija que va a jardín de 5 años, o sea, no sabe leer ni escribir, es larguísima. No sé que voy a hacer cuando tenga que comprar los útiles", despotricó Ricardo, que manda a su hija a una escuela privada.
Tal vez los precios sueltos no parezcan tan altos, pero entre todos los que se necesitan para empezar las clases suman una considerable cantidad de dinero. El bolígrafo Bic más barato vale 80 centavos, un compás cuesta 2 pesos, una plasticola voligoma está 1,20 y una caja de crayones de 6 unidades, 1,20.
Y esos precios son los más accesibles del mercado. Porque si se eligen los productos con licencias -los que llevan dibujos de personajes de Disney, de las Chicas Superpoderosas o Barbie- el precio ya toca las nubes.
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La Ciudad
