Aplausos para "Confesiones de una mente peligrosa"

Berlín bendijo el debut detrás de las cámaras de George Clooney

La película, basada en las revelaciones de un asesino a sueldo de la CIA, fue bien recibida por el público La película, basada en las revelaciones de un asesino a sueldo de la CIA, fue bien recibida por el público

Un George Clooney bastante más serio que dos días atrás, cuando presentó "Solaris", pasó con éxito la dura prueba de exhibir en el 53º Festival de Cine de Berlín su primera película como director, "Confesiones de una mente peligrosa".
"No hice este filme porque quería debutar como director. Lo hice porque quería que se hiciera", explicó el actor estadounidense, de 41 años, tras escuchar los elogios de los periodistas.
El guión de Charlie Kaufman sobre la vida del productor de televisión Chuck Barris, que llevaba una doble vida como asesino a sueldo de la CIA, había estado ya dos veces en preproducción, pero nunca se había concretado la película. "Pensé «no hay tantos guiones buenos» y me decidí a salvarlo", dijo Clooney.
La cinta, que protagoniza Sam Rockwell, se basa en la autobiografía escrita por el mismo Barris, pero al igual que ésta no se atiene exactamente a los hechos reales. Clooney aprovechó el material para realizar una sátira sobre la televisión y la mentalidad estadounidenses. Barris, quien hoy tiene 73 años, fue un popular creador de concursos televisivos de baja calidad en los 60.
En ese sentido, el actor de "La gran estafa" señaló que es peligroso que los noticieros estadounidenses se hayan convertido en entretenimiento. "En el transcurso de la historia siempre tuvimos programas con el denominador común más bajo -dijo-. El problema es ver hasta dónde se baja el nivel".
Además de Rockwell, aparecen en papeles importantes Drew Barrymore, Julia Roberts y el mismo Clooney. "Sentía una gran responsabilidad -admitió-. Ellos hicieron la película porque les parecía un buen proyecto y no por el dinero. Mi mayor temor era no defraudarlos".
"El secreto estuvo en que encontré actores que estaban dispuestos a correr el riesgo", explicó, y sonriendo añadió: "Y debo reconocer que es divertido darle órdenes a Julia Roberts".
En cuanto a la diferencia entre la actuación y la dirección, el actor señaló: "A un actor no le preguntan por el tamaño de su cerebro. En cambio, de un director quieren saber qué quiso decir, qué le pasa por dentro".
Clooney ya había comparecido ante la prensa y los fans de la Berlinale cuando el sábado pasado presentó "Solaris", la remake del clásico de ciencia ficción del ruso Andrei Tarkovsky que dirigió por Steven Soderbergh. Ese día mostró su lado más bromista, quizá a modo de defensa ante las críticas que recibió la película.
"Solaris" y "Confesiones de una mente peligrosa" compiten con otras 20 producciones por el Oso de Oro, que se entrega el próximo sábado. Ayer se presentaron además a concurso "My Life Without Me", de la española Isabel Coixet, y "La Fleur Du Mal", del francés Claude Chabrol, ambas aplaudidas por la prensa especializada.

El actor afirmó que filmó porque quería hacerlo.