Caso García Belsunce: Vence el plazo legal para decidir la suerte del fiscal

La Justicia debe dar hoy una respuesta al pedido de recusación planteado por la defensa de los imputados

Buenos Aires.- El juez de Garantías de San Isidro, Diego Barroetaveña, definiría hoy si el fiscal de Pilar, Diego Molina Pico, sigue al frente de la causa que investiga el posible encubrimiento del crimen de María Marta García Belsunce, al resolver la recusación planteada por los imputados. Es que hoy vence el plazo legal para que el magistrado se expida respecto del alejamiento del fiscal de la causa solicitado por los abogados de los familiares y allegados a la víctima, que según Molina Pico encubrieron a el o los autores del asesinato.
Los abogados de los familiares de María Marta imputados, Marcelo Nardi y José Licinio Scelzi, recusaron al fiscal aduciendo que horas después de descubierto el cadáver de María Marta -el 27 de octubre último en el Carmel Country de Pilar- había concurrido al velatorio y que por lo tanto se había convertido en testigo. Para los letrados, el fiscal también cometió irregularidades.
Nardi y Scelzi fundamentaron también su pedido de alejamiento de la causa del fiscal con el presunto error cometido por Molina Pico al labrar las primeras actuaciones a 48 horas de que se conoció la muerte de María Marta y no dejar constancia sobre lo que lo llevó a iniciar la investigación por la muerte.
Molina Pico se defendió asegurando que había llegado al velatorio en calidad de fiscal porque lo había convocado el jefe de la DDI San Isidro, comisario mayor Aníbal Degastaldi, quien a su vez había sido alertado por el fiscal de Casación Juan Manuel Romero Victorica, sobre un caso de muerte sospechoso.
Precisó que cuando llegó al lugar, junto al jefe policial, se entrevistó con Romero Victorica y que éste le manifestó que en realidad se había tratado de un lamentable accidente en el baño.
Sin embargo en reiteradas declaraciones periodísticas Romero Victorica dijo que fue el "el motor de la investigación", ya que desde un principio "no cerraba" que la mujer había muerto al resbalarse en la bañera.
Vale recordar que tras varios días se exhumó el cadáver de María Marta y se descubrió que en realidad no había muerto al golpearse en la ducha, sino que tenía cinco balazos en la cabeza.
Molina Pico dijo que en el velatorio pidió a los familiares el certificado de defunción y que éstos le contestaron que estaba en poder de la funeraria, por lo que se fue sin acceder a el. Desde entonces, dijo, actuó siempre como fiscal sin perder nunca la objetividad. (Télam)