Media docena de bancos privados anticiparon la semana pasada la apertura del corralón. En las puertas de las entidades se vieron las tradicionales protestas pero puertas para adentro no pasó nada, porque hubo escasa demanda para retirar las colocaciones. Algunos valoraron la solidez del sistema financiero, pero otros advierten que en realidad los ahorristas van por más, y están a la espera del fallo redolarizador de la Corte Suprema de Justicia.